El déficit corriente llega al 4,9% del PIB, máximo en dos décadas

El desfase con el exterior suma y sigue. En el año 2004 el déficit por cuenta corriente (engloba los intercambios comerciales, de servicios, transferencias y rentas) alcanzó la astronómica cifra de 39.538 millones de euros

El desfase con el exterior suma y sigue. En el año 2004 el déficit por cuenta corriente (engloba los intercambios comerciales, de servicios, transferencias y rentas) alcanzó la astronómica cifra de 39.538 millones de euros, lo que supone un fortísimo incremento del 90% sobre los 20.800 millones del ejercicio anterior, según publicó ayer el Banco de España.

El déficit corriente equivale ya al 4,9% del PIB, un porcentaje semejante al de la administración estadounidense y jamás visto en la historia económica española en las dos ultimas décadas. El ratio es superior incluso al registrado a principios de los años 90, en donde alcanzó el 3,7% poco antes de la crisis económica de 1993.

Varios factores que confluyen en una misma dirección han ayudado a alcanzar esta cifra en 2004. El más importante, sin duda, es la balanza comercial, cuyo déficit ha pasado de 37.800 a 51.900 millones de euros en sólo doce meses. Las exportaciones de bienes españoles se han mostrado con fortaleza (crecieron el 5,7%) pero no han podido compensar el dinamismo de las importaciones (aumentaron el 16%).

El vicepresidente Solbes prevé que el próximo plan de fomento empresarial ayude a aliviar la situación

Turismo, insuficiente

También han influido otros factores como un turismo cuyo superávit (28.000 millones) se ha recortado en relación a otros ejercicios, fruto, por un lado, de la crisis que está viviendo el sector en los archipiélagos, y por otro, de la mayor salida de españoles al exterior para pasar las vacaciones, algo que ha drenado recursos (divisas). La subbalanza de rentas también ha sumado su granito de arena en su particular desfase negativo, con otros 2.000 millones de euros (hasta los 12.000 millones al final de año).

La balanza de capitales se ha resentido, igualmente, en 2004. El tradicional excedente en esta cuenta no sólo no ha aumentado sino que ha caído en 200 millones de euros, fruto del mejor comportamiento relativo de las inversiones españolas en el exterior frente a los flujos de capital que llegaron a España. Descontado el excedente de capital, la economía española registró en 2004 una necesidad de financiación de 31.000 millones de euros, 2,5 veces más que en 2003. El vicepresidente Pedro Solbes, reconoció ayer que el desequilibrio exterior es muy importante y 'debe ir corrigiéndose de forma paulatina'. Solbes achacó estos malos resultados a la fortaleza de la demanda interna, que está tirando en demasía de las importaciones, y señaló que el próximo plan de fomento empresarial ayudará a aliviar el desfase. El problema que tiene ahora la economía española es que no cuenta con el recurso a la devaluación del tipo de cambio como hace diez años.

Desde el PP se echa la culpa a la 'inoperancia del Gobierno' para incentivar los productos españoles en el exterior.