Los hombres gastan 227 euros cada seis meses en cosmética
Para ocho de cada diez hombres es 'completamente aceptable' que un hombre use productos de cosmética. En una sociedad en la que todavía el uso de afeites está directamente asociado a la mujer, ese dato será sin duda bien recibido por las empresas del sector. Ahora bien, como así revela un estudio que Ipsos-Eco Consulting ha realizado para la revista Men's Health, todavía hay un 44% de hombres que consideran que la cosmética no es para ellos. Eso sí, en un alarde de generosidad social, aceptan que otros la utilicen.
Frente a estos datos de tolerancia, el gasto medio en cosmética durante seis meses es de 227 euros. El estudio no ofrece cifras de años anteriores para comparar. Pero en todo caso basta pensar que una cesta de la compra estándar compuesta por básicos como pasta de dientes (3,50 euros), gel y champú (7 euros), desodorante (1,85), colonia y aftershave (15 euros) y similares sale por unos 50 euros. Según el estudio, los productos del aseo tradicional son los más utilizados.
No obstante, ya hay un porcentaje de hombres que también acude a tratamientos profesionales como limpieza de cutis (27%) y depilación (20%). Productos como las cremas que evitan las ojeras, retrasan la aparición de arrugas o los que son reafirmantes sólo son usados por el 18%.
Para la mayoría de los 400 hombres encuestados, con edades comprendidas entre los 20 y los 45 años y de nivel económico medio alto, es más importante su aspecto físico ahora que hace 10 años. No obstante, el estudio compara los datos que ha obtenido de su segmento encuestado con los del estudio a nivel nacional de EGM. La conclusión es que a mayor nivel económico mayor consumo de cosméticos.
Entre las motivaciones de uso, el 90% de los hombres responde que es para sentirse mejor, el 72% porque forma parte de su plan para cuidarse más y el 66% para seguir gustando a su pareja. De media, los hombres utilizan unos 8,5 productos, la mayoría (71%) elige por sí mismo, aunque reconoce guiarse por aspectos como el precio, el olor y el reconocimiento de la marca.