El PIB de EE UU crece un 3,8% en el cuarto trimestre y un 4,4% en el conjunto de 2004
El Producto Interior Bruto (PIB) de Estados Unidos creció un 3,8% en el cuarto trimestre, dos décimas menos que en el tercer trimestre, y en todo el año ha aumentado un 4,4%, ha anunciado el gobierno según la segunda estimación publicada hoy por el Departamento de Comercio estadounidense.
En este primer ajuste, de los dos que se publican de las cifras,el Departamento de Comercio aumentó en siete décimas el cálculo del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) hecho hace un mes. El ajuste se debió principalmente a las nuevas cifras sobre mayores exportaciones y gastos de las empresas que, en parte, fueron contrarrestadas por aumentos de las importaciones y reducciones en el gasto de los consumidores, que equivale a casi dos tercios del PIB de EEUU.
La revisión del dato refleja que la inversión en capital fue mayor de lo previsto, así como el gasto en inventarios. El Departamento de Comercio indicó que la cifra de hoy incluye también un nuevo análisis de las exportaciones y del consumo nacional, que fue revisado a la baja.
Las exportaciones netas contribuyeron de forma negativa al PIB del cuarto trimestre, al que restaron 1,43%. En el cuarto trimestre, las importaciones subieron un 11,4% respecto al periodo anterior, y las exportaciones tan sólo un 2,4%. El déficit comercial estadounidense alcanzó los 600.000 millones de dólares en 2004 por primera vez en su historia.
La ligera ralentización del crecimiento económico del cuarto trimestre fue favorecida por el incremento del déficit comercial, derivado del aumento de las importaciones de bienes y la caída de la exportaciones. Asimismo, también influyó la ralentización de la demanda interna originada por la reducción de las grandes compras (automóviles, viviendas,...) llevadas a cabo por los estadounidenses en el cuarto trimestre.
Por el contrario, el PIB del último periodo de 2004 se vio favorecido por un incremento de la inversión en inventarios, que fue negativa en el tercer trimestre, así como por el aumento de la inversión empresarial en equipos y software.
Ralentización de la demanda interna
La demanda interna ha subido un 4,2% en el cuarto trimestre, frente a un incremento del 5,1% en el periodo anterior. Los estadounidenses gastaron más en bienes no duraderos (+6,1%) y en servicios (+3,4%), pero este incremento no fue suficiente para compensar la ralentización del gasto en bienes duraderos (+3,1%), que creció 14,1 puntos menos que en el trimestre anterior.
El beneficio real disponible por persona subió un 8,1% en el cuarto trimestre, 5,2 puntos más que en el tercer trimestre, impulsado por el dividendo especial pagado por el grupo informático Microsoft.
El aumento de los precios de la energía provocó que el deflactor del PIB progresara un 2,8% en el cuarto trimestre, nueve décimas más que en el trimestre anterior. Sin tener en cuenta los precios de la energía y la alimentación, el deflactor aumentó un 1,9%, dos décimas más que en el tercer trimestre.