Móviles pierde clientes en España por primera vez en su historia
Telefónica Móviles ha combinado en el cuarto trimestre el mayor crecimiento de su historia en ingresos con el segundo peor registro en beneficios. Es el reflejo del año. La operadora ha sacrificado la rentabilidad para capturar ahora las oportunidades de mercado y disfrutarlas después.
Las compras de las operadoras de Bellsouth y de la filial de Telefónica en Chile han tenido su efecto en los resultados de 2004 para lo bueno y para lo malo. Lo mismo ha sucedido con la agresiva estrategia de inversión y comercial de Telefónica Móviles para ganar terreno en los mercados latinoamericanos con más potencial de crecimiento.
Los resultados se reflejan en las cuentas de la operadora de 2004. Sólo dos meses de consolidación de las filiales de Bellsouth -y no todas- y menos de un semestre de la operadora chilena han provocado un fuerte crecimiento en los ingresos, pero una mala evolución de los beneficios, el fondo de comercio y la deuda.
Tanto en el acumulado del ejercicio como en el cuarto trimestre, Móviles se ha destacado como una de las operadoras con mejores tasas de crecimiento. El alza en ventas entre octubre y diciembre ha sido del 29,8%, la mayor de su historia.
Pero si fuerte ha sido el crecimiento, más lo ha sido el gasto, con subidas que han llegado al 47,5%. A este ritmo, la erosión de los resultados se percibe ya en la línea del Ebitda, sobre todo porque en el último ejercicio, y a diferencia de lo que es tradicional en ella, la filial de telefonía móvil española no ha tirado en este apartado como acostumbraba a hacer.
Del crecimiento del gasto es responsable la agresividad comercial e inversora de Móviles en casi todos los países donde opera, desde España -desembolsos en UMTS y rivalidad con sus dos competidores-, hasta México, Brasil o Argentina. A partir de este punto, la responsabilidad de los impactos negativos es de las adquisiciones.
La fuerte subida de las amortizaciones no tiene otros culpables que las filiales de Bellsouth y Chile, al igual que el incremento del fondo de comercio en el cuarto trimestre. También la deuda ha recibido su parte, y se ha disparado un 60,7% en el año, hasta 8.176 millones. En este último caso, sin embargo, el impacto todavía no se ha dejado sentir en la cuenta de resultados.
Todo ello ha recibido una ayuda fundamental procedente de Puerto Rico. Los problemas de Telefónica Móviles con su socio local le han llevado a renunciar a la gestión, lo que ha dado lugar al saneamiento de algunas partidas. El efecto ha sido un fuerte crecimiento de los extraordinarios y una nueva resta a los beneficios, que queda estancados en el acumulado de año -el alza es del 1,6%- y caen un 20,8% en el cuarto trimestre, el segundo peor registro de su historia.
Para demostrar que la política agresiva en estrategia comercial y adquisiciones no perjudica la accionista y que Móviles sigue teniendo una estructura financiera fuerte, la operadora ha aprobado un aumento del dividendo del 5%. La subida es inferior a la esperada por el mercado, de ahí la caída en Bolsa, pero aun así representará para la pagadora un desembolso de 836 millones, el 51% de su beneficio, a razón de 0,193 euros por título.
Pero no sólo el dividendo refleja los resultados de la estrategia de Telefónica Móviles. Sólo en el cuarto trimestre, la operadora ha captado seis millones de clientes y suma un total de 74,4 millones en el mundo. En ese mismo periodo, las operadoras adquiridas a Bellsouth han aportado 425 millones de euros y han comenzado a mermar el fuerte peso de la filial española en los resultados financieros globales.
En estos momentos, Telefónica Móviles tiene el 71% de sus clientes en Latinoamérica y, aunque el desequilibrio sigue patente, su aportación a los ingresos ha subido hasta el 30,9%.
Esto ha sido posible porque, mientras la facturación en España crecía un 9,3% en el año, en Latinoamérica lo hacía a un ritmo del 42,1%. Más espectacular es el cuarto trimestre, cuando los ingresos procedentes del otro lado del Atlántico se han duplicado, con España creciendo al 5,9%. En el Ebitda las cosas no han ido tan bien, porque el latinoamericano ha caído un 2% en 2004. Otra vez, el cuarto trimestre ha puesto la nota de esperanza, porque en ese periodo el alza ha sido del 55,4%.
Y para el futuro, la operación de Bellsouth trae consigo otros dos impactos, uno positivo y otro negativo. El malo es el fondo de comercio, que sube 2.055 millones por la adquisición y que sólo se amortizará si se deteriora. Lo bueno es el crédito fiscal, que puede llegar a 400 millones en 20 años.
La subida trimestral de ingresos es la mayor de la historia de la compañía
Alemania emite una orden de revocación de la licencia de UMTS
Las licencias de UMTS que Telefónica Móviles tiene repartidas por el Viejo Continente le siguen dando quebraderos de cabeza. La última mala noticia ha procedido de Alemania, donde el regulador ha emitido una orden de revocación de la licencia de Quam, la filial germana de Móviles y Sonera, según ha reconocido la operadora en la documentación hecha pública ayer.La orden es del 15 de diciembre y Quam tiene hasta el 28 de febrero para recurrir la decisión. Fuentes conocedoras del proceso, sin embargo, aseguran que la retirada de la licencia ni es segura ni es inminente.Estas fuentes explican que la emisión de la orden abre un periodo de negociación o alegaciones, en los que la compañía intentará hacer ver al regulador que existen opciones abiertas para el futuro de su filial más allá de la retirada del permiso.En Suiza la situación tampoco es la más favorable, porque el regulador ha iniciado un procedimiento de supervisión por el incumplimiento de las obligaciones de la licencia. En este caso, sin embargo, Telefónica Móviles ha contactado ya con un posible comprador que repartirá luego el espectro entre los operadores suizos. Sólo falta la autorización del regulador.