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Petroleo

Brufau aplica un fuerte saneamiento en Repsol que hace caer el beneficio un 3,5%

Repsol YPF obtuvo el año pasado un resultado neto de 1.950 millones, lo que supone un descenso del 3,5%. Esta evolución es consecuencia del saneamiento extraordinario de 682 millones aplicado por la compañía. Su beneficio operativo creció un 17,8%

El nuevo presidente de Repsol YPF, Antonio Brufau, ha procedido al método clásico de cualquier relevo: saneamiento de las cuentas de su predecesor, Alfonso Cortina, para situar bajo el listón de medida para el próximo año. Esta política explicaría que Repsol, al contrario que sus competidoras europeas que están registrando beneficios récord, haya reducido su beneficio neto en un 3,5% en el último ejercicio, hasta 1.950 millones. El 'fuerte saneamiento extraordinario', según la empresa, que ha provocado este descenso suma 682 millones.

No obstante, el resultado operativo, creció un 17,8%, hasta 4.547 millones. La petrolera atribuyó el 'fuerte avance' del resultado operativo a la buena evolución de todas las áreas de negocio, que experimentaron un 'aumento significativo' en sus resultados.

El crecimiento fue especialmente importante en el caso del refino, con un alza del resultado operativo del 36,2% y unos márgenes que registraron récord históricos. Los resultados en exploración y producción crecieron un 12,2%, con un aumento del 3% en la producción media de hidrocarburos.

En gas y electricidad, el resultado operativo fue de 274 millones, un 29,2% más.

También los ingresos operativos de la petrolera aumentaron un 12%, hasta alcanzar los 41.689 millones.

Para la compañía, las cuentas han estado marcadas por un año de fuertes incrementos de los precios del petróleo y la depreciación del dólar frente al euro en un 9,9% frente al euro. Además, la tasa impositiva de la compañía pasó del 32% al 37,5%.

20 millones para Cortina

El plan de saneamiento de Repsol ha supuesto realizar unas provisiones totales, contabilizadas como resultados extraordinarios, de 682 millones, de los que 667 millones se dotaron en el último trimestre de 2004. De la cantidad total, 422 millones, correspondieron a diversas partidas para posibles contingencias fiscales del grupo, fundamentalmente en España y Argentina; 89 millones a depreciaciones de activos, en su mayor parte en las estaciones de servicio en Brasil (35 millones) y Perú (10 millones).

Además, provisionó 140 millones para contratos, como el firmado con Petrobrás (56 millones) y el correspondiente al oleoducto de Crudos Pesados en Ecuador (89 millones). También anotó 20 millones por la indemnización por la liquidación del contrato de su anterior presidente, Alfonso Cortina.

Las inversiones realizadas durante el ejercicio ascendieron a 3.747 millones de euros, con un descenso del 2,3% respecto a 2003.

Áreas de negocio

El resultado operativo en exploración y producción ascendió a 2.638 millones, un 12,2% más en euros y un 23,3% más en dólares, gracias a los mayores precios internacionales del crudo, la mejora en los precios del gas, y los aumentos de producción y venta de gas en Bolivia, Argentina y Trinidad y Tobago.

La producción media de hidrocarburos se elevó un 2,9%, hasta 1.165.800 bep (barriles equivalentes de petróleo) al día y la de gas un 11,2%, hasta los 598.500 bep al día

Los márgenes de marketing en España fueron ligeramente inferiores a los de 2003, mientras que en Argentina fueron inferiores, ante la imposibilidad de trasladar el incremento de las cotizaciones al precio final.

Por su parte, el resultado operativo del área química aumentó un 63,2%, hasta 253 millones, gracias al mayor volumen de ventas y los mejores márgenes internacionales en Argentina.

Las reservas se reducen un 4,1%

A cierre de 2004, las consultoras De Golyer & Mc Naughton y Gaffney Cline & Associates concluyeron la auditoría de los activos del libro de reservas de hidrocarburos de Repsol YPF, iniciada hace tres años. En ella se determina que las reservas probadas de Repsol YPF se han reducido un 4,1%, hasta alcanzar los 4.926 millones de barriles equivalentes de petróleo (bep), debido, según la compañía, a ajustes a los campos de gas de Ramos y Loma La Lata y Trinidad y Tobago, así como al campo de crudo de Albacora Leste.Por otra parte, la empresa pudo reducir su deuda un 2,5% sobre 2003, situándola en 4.920 millones, gracias a la fuerte generación de caja, que creció un 19,9% en el conjunto del año y un 68,2% en el último trimestre. La mayor reducción (678 millones) se llevó a cabo, precisamente, en los últimos tres meses del año. La ratio de endeudamiento se fijó en el 20,7% y los costes financieros cayeron un 28,3%, hasta 287 millones.

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