Reino Unido acepta el fin del régimen fiscal de Gibraltar
Reino Unido ha aceptado la supresión gradual, de ahora hasta 2010, del régimen fiscal especial por el que se benefician más de 8.000 empresas off-shore afincadas en Gibraltar.
El Gobierno británico comunicó el viernes a la Comisión Europea que acepta sus condiciones para desmantelar progresivamente hasta 2010 las ventajas fiscales de las llamadas sociedades exentas de Gibraltar. Se trata de sociedades radicadas en el Peñón pero que no realizan actividad comercial o empresarial en la Colonia, ni cuentan con gibraltareños o residentes entre sus accionistas. En virtud del actual régimen fiscal gibraltareño, estas empresas no están sujetas al impuesto ordinario del 35% sobre los beneficios, sino sólo a una pequeña tasa fija anual de entre 225 y 300 libras esterlinas (350 a 500 euros).
En los últimos años, el Ejecutivo comunitario ha venido considerando que este régimen viola la prohibición de la UE de conceder ayudas estatales. Tras meses de contactos con el Gobierno británico, Bruselas planteó el 19 de enero un plan de desmantelamiento del régimen y dio cuatro semanas a Londres para que diera una respuesta, que ahora ha sido afirmativa.
La comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, mostró el viernes su satisfacción por el sí de Londres y recalcó que 'la supresión de este régimen es otro paso importante para eliminar las prácticas fiscales perjudiciales que infringen las normas de la UE'. La aceptación del Reino Unido significa que el número de empresas beneficiarias queda limitado a 8.464, el que existía a finales de 2003. Sus ventajas quedan 'protegidas' hasta el 31 de diciembre de 2010. Si su titularidad o actividad cambiara antes de julio de 2006, sólo estarían protegidas hasta diciembre de 2007. Si el cambio se produjese después de julio de 2006, el beneficio fiscal cesaría inmediatamente. Hasta 2006 podrán acogerse al régimen nuevas compañías hasta un cierto límite y condicionadas a que se excluyan del mismo otras tantas. El secretario de Estado de Asuntos Europeos, Alberto Navarro, cree que la decisión de Londres ayudará al éxito de las conversaciones sobre el futuro de la Colonia.
Bruselas apoya la vía del arbitraje
La eliminación de los paraísos fiscales no es la única vía que persigue la UE para normalizar las relaciones tributarias.Bruselas está apoyando la vía del arbitraje en los conflictos de doble imposición fiscal en empresas que desarrollan su labor en más de un país comunitario y que se ven abocadas a pagar a diferentes Haciendas estatales por el mismo hecho imponible. En noviembre la UE renovó el convenio internacional sobre arbitraje en precios de transferencia.Ahora, el Consejo de Ministros de Economía (Ecofin) de la UE acaba de aprobar un código de conducta que desarrolla el convenio. En el código se pide a los Estados que suspendan el cobro de deudas tributarias con las empresas que decidan acudir a un arbitraje para solucionar sus problemas con los Gobiernos, en vez de acudir a los tribunales. El uso de este procedimiento 'ahorrará costes y tiempo a empresas y administraciones', dice Eduardo Gracia, socio del bufete Ashurst y miembro del foro de expertos encargado de velar por el desarrollo del convenio. Montserrat Trapé, vicepresidenta del foro, valora también 'el esfuerzo de las Administraciones públicas para eliminar la doble imposición'. El código de conducta sugiere a los 10 nuevos Estados de la UE que ratifiquen el convenio en un máximo de dos años, informa Begoña Barba. El foro proseguirá en marzo con sus trabajos.