González afirma que todo lo que ha hecho es 'moralmente aceptable'
La velocidad de crucero que la segunda entidad bancaria española se impuso en 2004 se ha transformado en un resultado récord. El BBVA cerró el pasado ejercicio con los mayores beneficios de su historia y, superando las expectativas de los analistas, aumentó un 25,8% el resultado atribuido hasta los 2.802 millones.
La velocidad de crucero que la segunda entidad bancaria española se impuso en 2004 se ha transformado en un resultado récord. El BBVA cerró el pasado ejercicio con los mayores beneficios de su historia y, superando las expectativas de los analistas, aumentó un 25,8% el resultado atribuido hasta los 2.802 millones. Las cifras, fruto del plan estratégico de 2002, se presentan en un momento especialmente delicado tanto para su presidente, Francisco González, que conoció en la presentación a la prensa la apertura de 'diligencias informativas' de la Fiscalía Anticorrupción por la venta de FG Valores, como para la entidad, que hace frente al intento de Sacyr por hacerse con el 3,1% del capital.
Frente al impulso que en 2003 supuso la banca mayorista, la clave para los 'excelentes resultados', como los calificó González, ha venido de la mano de la fortaleza del negocio minorista y, principalmente, del motor americano, que ya supone el 35% del beneficio antes de impuestos, con México a la cabeza. El BBVA consolidó en 2004 su posición en el nuevo continente con operaciones estratégicas como la compra del 40% que no poseía en el mexicano Bancomer, la adquisición de la principal entidad hipotecaria en este país, Hipotecaria Nacional, y dos entidades en EE UU, Valley Bank y Laredo National. En conjunto, la inversión americana ha sido de 4.300 millones y por primera vez, los resultados netos de este área, que se incrementaron un 24,6% hasta los 1.459 millones de euros, han cubierto la depreciación de las divisas.
La evolución de los márgenes ha hecho posible, además, que se absorban los 372 millones de euros de las 1.372 prejubilaciones y que esta vez se han cargado contra resultados en vez de contra reservas, según las nuevas directrices del Banco de España. González explicó que, siguiendo criterios de prudencia, se ha cargado los 37 millones abonados en Banca Nazionale del Lavoro (BNL) así como el 100% de la amortización del fondo de comercio de la entidad italiana, donde BBVA posee el 14,9%, ya que el banco ha anunciado que no obtendrá beneficios.
'Ser un buen banco no es suficiente', señaló González. 'Hay que ser excelente'. Con la máxima ambición, González señaló que 'claramente esperamos un crecimiento de beneficios de dos dígitos para 2005 y sería espectacular estar por encima del 20%'.
PYMES Prioridades de la gestión para el año 2005
José Ignacio Goirigolzarri, consejero delegado del BBVA auguró un 'magnífico ejercicio' para 2005. Entre las prioridades del BBVA se encuentra la consolidación del crecimiento y apertura de unas 140 oficinas de la red nacional. El enfoque se pondrá además en el negocio de pymes. El consejero delegado de la entidad señaló que no será necesaria la incorporación de nuevos empleados ya que se piensan amortizar con mejoras de productividad.
Crecimiento Sólido A la cabeza de los grandes bancos europeos
Los resultados del BBVA se han obtenido con 'elevada calidad' y 'mejorando la eficiencia y rentabilidad', señaló el presidente de la entidad. De esta forma el ROE (la rentabilidad sobre fondos propios), se sitúa en el 20% mientras que la eficiencia se redujo al 44,9% desde el 47,2% del año anterior. 'Estamos entre las 15 primeras entidades del mundo'. González destacó, además, la alta calidad de la cartera, con un ratio de cobertura del 247%, el más alto de la banca europea.
Adquisiciones 'Queremos crecer a base de músculo, no de grasa'
González señaló ayer que el BBVA 'analiza aquellas compras que sean generadoras de valor y encajen con la estrategia'. El presidente del BBVA se refería así a que su grupo estudia continuamente posibles compras, aunque no quiso referirse a los rumores de un posible interés en el británico Lloyds TBS. 'No estamos presionados por las operaciones que hagan nuestros competidores', dijo en referencia a la adquisición del Abbey por el Santander.