Telefónica compite en la venta de la operadora estatal checa
El Gobierno de la República Checa ha puesto en marcha el proceso para la venta de un paquete mayoritario de la operadora líder del país, Cesky Telecom, en una operación valorada en unos 2.000 millones de euros. La puja se abrió el pasado 21 de diciembre y ya ha recibido importantes adhesiones.
Según el vicepresidente de la agencia estatal dueña de la operadora, el Gobierno cuenta ya con lo que podrían llamarse nueve ofertas preliminares. Y muchas de ellas proceden de las telefónicas más importantes de Europa. Telefónica es una de participantes, como también lo son Vodafone, TDC, TeliaSonera y Swisscom. France Télécom todavía no se ha registrado en la subasta, pero se espera que sea una de las candidatas más firmes a la compra.
Europa, en segundo plano
El paso que ha dado Telefónica no compromete a nada. La compañía española se ha limitado, en el fondo, a demostrar interés en la puja de forma que puede tener acceso a los datos de la venta. Con ellos en la mano, decidirá si hace una oferta o se retira de la contienda. Fuentes cercanas a la compañía aseguran que lo más probable es que nunca se materialice una propuesta económica y que Telefónica está analizando Cesky Telecom como se miran otras muchas compañías.
Sin embargo, como mínimo resulta llamativo que Telefónica haya vuelto a poner su mirada en Europa, un mercado por el que asegura no apostar y del que se retiró después de la incursión en la telefonía celular UMTS. A diferencia de la filial de Móviles, además, Telefónica no se ha interesado en otros procesos de privatización en la zona.
Un incierto final
No es la primera vez que la República Checa piensa en privatizar su operadora. Y tampoco está claro que ahora vaya a terminar en manos de una operadora. El Gobierno quiere testar la calidad de las ofertas y luego decidirá si se lo vende o lo saca a Bolsa.