Feria Valencia no puede hacer frente a su plan de financiación
La Generalitat Valenciana tendrá que salir al rescate de Feria Valencia. La entidad que explota el recinto ferial valenciano no puede hacer frente al plan de financiación que diseñó para pagar las obras de ampliación que se están ejecutando, en especial al pago de los intereses de los obligacionistas que suscribieron la emisión de 227,5 millones que realizó la institución.
Feria Valencia cerró el ejercicio 2004 (ya ha terminado el periodo de certámenes) con un beneficio neto de 4,5 millones de euros. Esa es la cantidad de que dispone la institución para pagar los intereses a los obligacionistas, para 2005 15,98 millones, y para dotar la cuenta de reserva que servirá para devolver el capital en 2027, año en que vencen los bonos.
Según fuentes oficiales de feria, al pago de intereses, que se efectúa el 15 de marzo de cada año, sólo se destinarán dos millones de euros. El resto, 13,98 millones, se obtendrán de una linea de crédito de 30 millones de euros que la entidad tiene firmada con el SCH y un banco italiano. Esta línea de crédito debe tener un saldo idéntico al inicial antes del 5 de septiembre de cada año, con lo que la Generalitat, que actúa como avalista de la operación, será quien acabe pagando la parte de los intereses de las obligaciones que la feria no puede asumir.
Respecto a la cuenta de reserva, según el folleto de la emisión de obligaciones, Feria Valencia se compromete a ir dotando cada año con una cantidad no determinada este fondo que servirá para que en 2027 se devuelva el total del capital a los obligacionistas, 227,5 millones de euros.
Sin embargo, y al margen de la mejora de resultados que pueda lograr la institución en los próximos años, las cantidades que presumiblemente puede aportar la feria a este fondo distan mucho de ser las que precisaría para llegar a la fecha con la cantidad total. Así, para 2005 Feria Valencia destinará sólo 2,5 millones de euros a esa cuenta, cuando una media aritmética apunta que la cifra que cada año necesita aportar para llegar a 227,5 millones en 25 años es de 9,1 millones de euros. Aquí, una vez más, la Generalitat Valenciana consta como avalista, de forma que si se llega a la fecha de liquidación sin contar con los fondos totales, será el Gobierno autonómico quien haga frente a esa deuda.
Todas estas dudas sobre la capacidad de Feria Valencia de hacer frente a la financiación de sus obras de ampliación hacen referencia sólo al primer plazo del mismo, ya que de los 325 millones previstos inicialmente, las obras van a costar al final 650 millones, es decir, el doble.
Más préstamos
Ese sobrecoste, que la feria atribuye a 'obras que no estaban previstas inicialmente', se cubre con un nuevo plan de financiación, consistente en un préstamo del Banco Europeo de Inversiones (BEI) de 62 millones de euros y un segundo crédito, que negociará el Instituto Valenciano de Finanzas en el mercado bancario, de 263 millones. De nuevo la Generalitat aparece como avalista en estas dos operaciones.
Dado que el volumen de negocio de Feria Valencia no alcanza para hacer frente al primer plan de financiación, parece evidente que el segundo lo acabará pagando íntegramente la Generalitat.