Estonia, de cabeza al euro
La corona estona se perfila como favorita para convertirse en la decimotercera moneda europea que se diluye en el euro.
El pequeño país báltico (1,4 millones de habitantes) sólo lleva ocho meses en la UE, pero ya ha dado pasos de gigante hacia la unión monetaria. Hoy mismo, el Banco Nacional de Estonia presentará el futuro diseño del reverso nacional de las ocho monedas de euro (el anverso es común a todos los países). El comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, asistirá en la capital estona, Tallin, a la ceremonia.
La elección se ha hecho por votación telefónica popular sobre 10 diseños. 'Si Estonia quiere estar técnicamente preparada para adoptar el euro a mediados de 2006, tenemos que saber a comienzos de 2005 como serán nuestras monedas', afirmó el Gobernador del Banco, Vahur Kraft, al convocar el concurso.
Y Estonia avanza con igual premura en las áreas menos simbólicas del proceso de convergencia. Su cumplimiento de los criterios de Maastricht puede sonrojar a alguno de los socios más veteranos de la eurozona: 2,6% de superávit fiscal y 5,8% de deuda en 2003, con una inflación del 1,3%.