La riqueza de los españoles crece a menor ritmo
La renta per cápita de los españoles llegó en 2003 a 15.311 euros, tras crecer un 4,99%. Pero expresada en dólares alcanzó los 17.316 por la fuerte revalorización del euro. Expresado en la divisa norteamericana la subida es de 3.537 dólares, un 25,66% más que en 2002.
Los datos sobre la renta nacional disponible de España han sido actualizados por el Instituto Nacional de Estadística en la Contabilidad Nacional del tercer trimestre de este año. En tal actualización, esta variable que tradicionalmente se calculaba en dólares, Estadística la ofrece ahora en euros, la moneda única europea, que gana consistencia tras seis años de circulación en los mercados financieros y tres en los bolsillos de los ciudadanos.
La renta nacional disponible neta a precios de mercado llegó el año pasado a 624.812 millones de euros; por tanto, con una población estimada por el INE de 40,809 millones de personas, la renta por habitante fue de 15.311 euros. En este ejercicio aumentó un 4,99% nominal, el crecimiento más modesto de los últimos ocho años, que había sido siempre superior al 5%, y en varios ejercicios superior incluso al 6% nominal.
En los años que transcurren desde 1995 a 2003 la renta per cápita de los españoles pasa de 9.731 euros a los 15,311, con un avance del 57,34%. El año con mayor aumento fue 1999, que registró un avance relativo del 6,63%, según revela la contabilidad nacional.
El avance de la renta en dólares es del 25,6% y supera los 17.300
Expresada en dólares, moneda en la que tradicionalmente se ha hecho esta variable, en 2003 habría llegado a 17.316, como consecuencia de la fuerte apreciación del euro en los mercados internacionales de divisas, y tomando como cambio medio 1,131 dólares por euro.
Estimaciones de 2004
En 2002 únicamente llegaba a 13.779 dólares per cápita, con un cambio medio de 0,945. Por tanto, en 2003, habría crecido en 3.537 dólares por habitante y un 25,66% en términos relativos, combinando avance nominal y tipo de cambio del euro.
Las estimaciones para 2004 sitúan la renta per cápita de los españoles por encima de los 20.000 dólares, ya que el cambio medio del euro cerrará el ejercicio en torno a 1,25 dólares (hasta noviembre es de 1,234 unidades por euro).
Por lo que se refiere a su distribución geográfica, los trabajos de la Contabilidad Nacional alcanzan únicamente al ejercicio de 2002, y revelan que hay cuatro comunidades autónomas en las que sus ciudadanos tienen una renta bruta disponible neta por habitante superior a la media. Es el caso de País Vasco, Navarra, Baleares, Madrid, La Rioja, Cataluña, Aragón y Cantabria.
Entre el 90% de la media nacional y la media se encuentran Castilla y León, Comunidad Valenciana, Asturias, Canarias y las dos ciudades norteafricanas Ceuta y Melilla. Con renta per cápita inferior al 90% de la media nacional estaban en 2002 Murcia, Galicia, Castilla La Mancha, Andalucía y Extremadura. En estos dos últimos casos no alcanzaban en 2002 los 9.000 euros per cápita. El País Vasco alcanzaba los 13.690 euros y Navarra rondaba los 13.500.
Las familias recomponen sus tasas de ahorro
Las familias comienzan a recomponer su ahorro. Tras seis años de recorte de la tasa de ahorro expresada como porcentaje de la renta bruta disponible, entre 1995 y 2001, en 2003 se ha consolidado una ligera recuperación de este variable. Así, en 2003, según los datos de la Contabilidad Nacional, la tasa de ahorro de los hogares fue del 10,6% de la renta bruta disponible. A esta cifra se llega tras un avance prácticamente similar, de entorno al 6%, tanto en la renta disponible como del gasto en consumo final.Por lo que se refiere a las fuentes de renta de los hogares, se observa que los ingresos que provienen de la distribución de las rentas generadas en el proceso productivo (rentas primarias) crecieron a una tasa del 6,4% en 2003. De ellas la remuneración del trabajo aportó un crecimiento del 6,7%, mientras que las rentas de la propiedad lo hicieron en una tasa del 9,8%.El ahorro total generado por los hogares en 2003 (renta no consumida) ascendió a unos 50.000 millones de euros, que fue suficiente para financiar el fuerte incremento de la inversión realizada por los hogares, que registró un avance del 12,9% sobre la realizada en 2002. Tras afrontar el proceso acelerado de inversión, las familias registraron una capacidad de financiación de 1.722 millones de euros en 2003, que supone el 0,2% del PIB, la cota más baja de toda la serie contable desde 1995. En el año 2002 la capacidad de financiación había llegado a 5.247 millones de euros, según Estadística. Pero no todos los agentes económicos institucionales tuvieron el mismo comportamiento austero, y la economía en general necesitó de financiación por valor de 15.553 millones de euros (2,1% del PIB), frente a los 10.917 del ejercicio anterior.El principal desajuste se produjo en las empresas no financieras, con una necesidad de financiación de 10.898 millones de euros. El ahorro de la economía fue de 168.000 millones, a los que se debe sumar 9.000 millones de saldo favorable de capital; pero fue insuficiente para financiar una inversión por valor de 194.000 millones.