¿Cuánto sube la vivienda?
La ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, ha suspendido la publicación de la estadística sobre la evolución del precio de la vivienda hasta que pueda contar con datos 'serios, rigurosos y transparentes'. De lo que se deduce que, en su opinión, el índice elaborado por Fomento, y considerado a todos los efectos como el 'oficial', no reúne esos requisitos. La ministra piensa crear su propio departamento de Estadística y promete que será 'el más serio, riguroso, fiable y transparente de entre los dependientes de organismos públicos'. Es decir, un equipo capaz de competir en credibilidad con el propio INE (que, por cierto, también prepara un índice del precio de la vivienda).
Trujillo hace bien en reclamar un departamento de Estadística propio y no es, ni mucho menos, la primera en cuestionar los datos manejados hasta ahora. Basar el índice de precios en información facilitada por empresas privadas implica claros riesgos, sobre todo en un mercado en el que mucho se mueve por las expectativas de revalorización del inmueble. Sin embargo, el PSOE utilizó profusamente esta estadística para culpar al gobierno del PP de la escalada en los precios de la vivienda, y entonces no cuestionaba su validez. No es el único argumento que arroja sombras. Trujillo se pronunció ayer sobre el tema a pregunta expresa de los periodistas, no ofreció más detalles sobre cómo será el nuevo índice, ni sobre cuándo estará disponible, lo que sugiere un cierto grado de improvisación.
Todo ello resulta inquietante, tratándose de una estadística primordial para buen número de ciudadanos, empresas y entidades financieras. Todos estos agentes se beneficiarán si finalmente se consigue elaborar una estadística más rigurosa. Pero Trujillo tendrá que hilar fino si quiere que el nuevo indicador goce de la credibilidad imprescindible en un dato que es clave en la economía del país.