Credibilidad en juego

Recuperar la confianza perdida. æpermil;sta ha sido la frase más repetida en el XIV Congreso de Censores Jurados de Cuentas, celebrado la pasada semana. Cuando se cumplen tres años del estallido del caso Enron, que se llevó por delante a Andersen, la primera firma de auditoría del mundo, el estigma de la falta de credibilidad aún sigue azotando a estos profesionales. Los auditores buscan fórmulas para recuperar la reputación perdida. Son conscientes de que no han sabido explicar la importancia de su trabajo, y de que aún existe una diferencia entre lo que realmente hacen y lo que la sociedad cree que hacen. Pese a la sensación generalizada de crisis, lo cierto es que el número de auditorías realizadas en España ha crecido los últimos años. Si en 2000 se realizaban 39.500 trabajos, en 2003 la cifra alcanzó los 49.500, un 25% más. Se quejan de que les mira con lupa y se sienten en libertad vigilada. Pero el auditor es quien está en primera linea de fuego frente a quienes tergiversan las cuentas, de ahí que deba extremarse el control de calidad de su trabajo.