Comienza el juicio contra los ex directivos de Parmalat
El juicio contra los ex directivos del grupo Parmalat, declarado insolvente a finales del año pasado en medio de un gran escándalo, se ha abierto hoy en Milán con la ausencia de los principales imputados y entre las protestas de cientos de inversores afectados.
La audiencia preliminar se celebró en medio de una enorme expectación en el aula magna del Palacio de Justicia de Milán, donde se congregaron más de medio centenar de abogados y multitud de accionistas en busca de compensación. El fundador y ex presidente de Parmalat, Calisto Tanzi, fue uno de los grandes ausentes "por motivos de salud", según su defensa, que hizo hincapié en su disposición a colaborar plenamente con la Justicia para reconstruir en su totalidad el proceso que llevó al "singular" colapso de Parmalat.
Tanzi y algunos de los entonces principales directivos de la sociedad fueron arrestados el pasado diciembre, pocos días después de que se detectara un "agujero" financiero de más de 14.000 millones de euros (unos 17.000 millones de dólares) en las cuentas del grupo.
A raíz de las investigaciones, la Fiscalía de Milán acusó a 29 personas y tres entidades (el Bank of America y la firmas auditoras internacionales Grant Thortnon y Deloitte & Touch) con cargos que van desde especulación abusiva hasta falsa información contable y obstáculo a la autoridad de vigilancia del mercado.
El actual gestor extraordinario de Parmalat, Enrico Bondi, actúa en el juicio como parte civil, al igual que el organismo rector de la Bolsa de Milán (Consob) y la asociación de consumidores Adusbef, que representa a 4.000 inversores para los que solicita una indemnización de ocho millones de euros sólo por los daños morales.
Rabia y frustración
La rabia y frustración de los afectados se pudo sentir a la entrada del Palacio de Justicia, donde una multitud se congregó para mostrar su indignación contra los antiguos responsables de Parmalat y los bancos que les aconsejaron invertir en valores de la sociedad láctea.
"Trabajé 36 años como tipógrafo y toda mi liquidación, 53 millones de liras (unos 27.300 euros), se la ha 'comido' Tanzi", señalaba airado Lionello De Checchi, un jubilado de 74 años que vio esfumarse sus ahorros con el "crack" del que era el octavo grupo industrial de Italia.
"Estamos aquí para ver la cara a los que nos han estafado", señalaba otro de los afectados, mientras que un tercero se lamentaba de que fue su banco el que le aconsejó adquirir acciones de Parmalat.
Se calcula que son más de 135.000 las personas que invirtieron su dinero en títulos y obligaciones emitidas en su día por Parmalat sin una cobertura sólida, y que por el momento no han obtenido ningún tipo de compensación.
El presidente de Adusbef, Elio Lannutti, mostró hoy su esperanza de que los afectados puedan recuperar al menos parte de los fondos invertidos y criticó el hecho de que en Italia "la tendencia es la de despenalizar la falsedad en los balances, mientras que en EE UU hay una ley que prevé 20 años de cárcel con efecto retroactivo".
Tras la audiencia de hoy, calificada de "burocrática" por los defensores de Tanzi, el juez Cesare Tacconi estableció la próxima sesión para el próximo 29 de octubre.
En la actualidad Parmalat, bajo la administración de Enrico Bondi -nombrado gestor extraordinario por el Gobierno-, se encuentra inmersa en un plan de reestructuración que pretende reducir las pérdidas este año a 108 millones de euros y volver a los beneficios en 2005.
El proyecto contempla además una retribución a los pequeños inversores de 650 "warrants" (opciones de compraventa de activos) por cada mil acciones y la reestructuración de la deuda con una inyección de capital para la distribución de los nuevos títulos, que podrían ser readmitidos en la Bolsa italiana el próximo mes de diciembre.