Trujillo reclama a las autonomías más esfuerzo en vivienda protegida
Lo que todo el mundo se temía cuando se creó el Ministerio de la Vivienda ha acabado por suceder. Sin la cooperación de las comunidades autónomas no se puede acometer una verdadera política de urbanismo a nivel nacional, como advirtió ayer la ministra, María Antonia Trujillo, quien exigió un mayor esfuerzo de coordinación para aumentar el parque de vivienda protegida.
María Antonia Trujillo volvió por segunda vez en año y medio a la cita con el Meeting Point; sin embargo, ayer lo hizo en calidad de algo muy diferente a su anterior puesto como consejera de Fomento de la Junta de Extremadura. Como ministra, además de inaugurar la feria, se esperaba de ella algo mucho más rotundo en materia de vivienda, y más cuando el sector parece que continúa su senda alcista en cuanto a precios de las casas y la demanda parece no remitir.
Las acciones puestas en marcha por su ministerio, el famoso 'plan de choque' que anunció al poco de asumir la cartera, no han dado resultados palpables, como reconoció ayer ella misma.
El problema parece ser la descoordinación entre las diferentes comunidades autónomas. 'Hay que fomentar un cambio cultural en materia de vivienda', aseguró Trujillo, ante un auditorio abarrotado. 'Para eso hay que exigir un esfuerzo en concertación y coordinación de todas las administraciones'.
'El gasto en vivienda se incrementa por primera vez un 33% en los Presupuestos del Estado'
Al estar transferidas las competencias sobre vivienda a las comunidades autónomas, es sumamente difícil acometer un plan integral y nacional, como se propone hacer Trujillo. El ministerio tiene en marcha la revisión del actual plan de vivienda, que incluirá seguramente medidas para impulsar el parque de viviendas protegidas, prácticamente nulo desde hace varios años.
Además, anunció Trujillo, están en desarrollo diversos planes de regeneración urbanística de puertos y zonas industriales en declive en diferentes ciudades de España. Sin la participación y la cooperación de las comunidades autónomas, sin embargo, será imposible llevar esos planes a cabo.
Según la ministra, 'el Gobierno central no sólo puede, sino que debe actuar cuando la dinámica del mercado interfiere en la preservación de un derecho constitucional como es el acceso a una vivienda digna'.
Trujillo aprovechó para criticar al anterior Gobierno. 'La cantidad de suelo urbanizable ha crecido en los últimos años, ¿pero por qué no se ha logrado sostener la escalada de precios?', se preguntó. 'Las políticas de vivienda y suelo en los últimos ocho años sencillamente no han existido, no ha habido gasto ni ayudas públicas', afirmó.
En posterior rueda de prensa, la ministra se refirió a los Presupuestos Generales del Estado para 2005, de los que destacó que 'se aumenta el gasto social por primera vez y en vivienda se incrementa en un 33%'.
Cinco problemas
En la inauguración del Barcelona Meeting Point estuvo también presente el alcalde de Barcelona, Joan Clos, quien resumió en cinco los problemas 'más acuciantes de la vivienda en España'.
Mencionó el incremento de precios, el difícil acceso de los inmigrantes a la vivienda, la debilidad del mercado de alquiler, la falta de políticas en la rehabilitación del parque urbano y la ocupación indiscriminada del suelo rural, 'que a veces es innecesario y genera costes'. Clos afirmó que tanto su Gobierno como el central están haciendo todo lo posible para paliar el problema.
Los retos del ministerio de nueva creación
Mayor competitividad al sector inmobiliarioLa ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, quiere emprender una verdadera renovación del sector, empezando por abajo. Afirmó que, además de facilitar el acceso a una vivienda a precios más baratos, la labor de su ministerio será también la de dotar de 'mayor competitividad' al sector inmobiliario. Recordó que la actividad constructora en España representa entre el 0,5% y el 1,5% del crecimiento económico y el 15% del PIB. Además, atrae el 30% de la inversión directa extranjera.Acceso de los inmigrantes a pisos dignosEl alcalde de Barcelona, Joan Clos, puso ayer el dedo en la llaga al poner de manifiesto la dificultad que tienen los inmigrantes para acceder a una vivienda. 'Vivimos en una de las grandes olas de inmigración, sólo en Barcelona ha pasado del 2% al 12% en pocos años', afirmó. Clos reclamó 'soluciones específicas' para los inmigrantes, ya que, aseguró, 'la integración pasa por la educación, la sanidad, el trabajo, pero también por la vivienda'. Clos rechazó rotundamente 'la creación de barrios específicos'.La lucha contra la carestíaA pesar de todos sus mensajes desde que llegó, hace seis meses, al Ministerio de la Vivienda, María Antonia Trujillo no ha tenido aún la satisfacción de ver bajar los precios de los pisos. Ayer volvió a afirmar que su principal política será 'luchar contra el efecto de la subida del precio de las casas, que ha expulsado del mercado a un alto número de familias'. Sin embargo, aunque afirmó que 'ya se están viendo los primeros resultados', no detalló cuáles eran ni tampoco profundizó en su plan de choque.
'Qué promoción más cara'
La ministra de Vivienda recorrió durante un par de horas el salón inmobiliario de Barcelona, dividido en dos zonas, la profesional y la dedicada al gran público. En este último pabellón, María Antonia Trujillo, acompañada en todo momento por el alcalde de Barcelona, Joan Clos, y una nube de asesores, empresarios y consejeros, se paró en varios stands para atender a las explicaciones sobre las promociones, centradas sobre todo en las cuatro provincias catalanas.En una de ellas se le mostró un proyecto de construcción de varios miles de viviendas en l'Hospitalet, la segunda ciudad más grande de Cataluña.Trujillo se mostró muy interesada hasta que le dijeron el precio de las viviendas. 'Me parece muy caro', afirmó. El alcalde Joan Clos no estuvo de acuerdo con ella y así lo expresó. Y luego, para limar asperezas, afirmó entre risas: 'las plusvalías se las debería quedar el Ayuntamiento, no la empresa'.