Branson y Allen se alían para abrir el espacio al turismo de masas
Será un vuelo de ensueño: nada de esperas interminables en el mostrador de facturación ni demoras en la sala de embarque ni overbooking. Dentro de un futuro 'no muy lejano', probablemente en 2007, cualquier viajero dispuesto a pagar 115.000 libras (172.000 euros) podrá disfrutar de un viaje al espacio, ida y vuelta. 'Nuestro objetivo es asegurar que en un futuro no muy lejano viajeros de todo el mundo puedan volar al espacio', afirmó el empresario y aventurero británico sir Richard Branson, fundador del imperio Virgin.
Branson hizo sus declaraciones en una presentación ante la Real Sociedad Aeronáutica de Londres. Branson aprovechó la ocasión para anunciar la firma de un contrato de 21 millones de euros con la empresa estadounidense Mojave Aerospace Ventures, creada por el pionero de la aviación Burt Rutan y el cofundador de Microsoft Paul Allen, con el objetivo de explotar la tecnología desarrollada para su nave espacial particular SpaceShipOne. La astronave figura como uno de los 10 proyectos que pujan por el premio Ansari X-Prize, de 10 millones de dólares (8,55 millones de euros), que se concederá al primer equipo privado que realice un vuelo de más de 100 kilómetros de altura, con tres personas a bordo, repitiendo el recorrido al espacio al menos dos veces en el plazo de 15 días, utilizando siempre la misma aeronave.
'El espacio representa la última frontera', dijo Branson. 'La ilusión de Virgin es de poner el turismo del espacio al alcance de las masas'. Branson, de 52 años, siempre ha tenido una debilidad por las actividades de aventura. Ha intentado cruzar el Atlántico y más tarde recorrer el mundo en globo. Hace poco batió el récord de la travesía más rápida del canal de la Mancha en coche anfibio. El rutilante millonario de barba roja lleva más de una década al frente de Virgin Atlantic, la aerolínea que forma parte de su imperio de unos 80 negocios distintos, cuyas actividades abarcan desde la moda hasta internet. Pero lo que más emoción le produce, según cuentan sus amistades, siempre ha sido todo lo relacionado con la aviación. Hay quien critica las grandes campañas publicitarias que acompañan las hazañas de Branson, pero sus amigos afirman que estas actividades le aportan beneficios comerciales, destacando el hecho de que, según un reciente sondeo, el 96% de los consumidores británicos reconoce la marca Virgin.
El multimillonario británico asegura que ofrecerá, 'en un futuro no muy lejano', vuelos por 172.000 euros
Rutan, uno de los fundadores de Mojave, lleva tiempo trabajando con Branson en el proyecto Global Flyer, que será el primer intento de realizar la primera circunnavegación del globo en solitario en un reactor ultraligero. Allen, socio de Rutan, es el principal capitalista detrás del proyecto. Branson explicó que la nave espacial será soltada por una nodriza a una altitud de 15.000 metros, desde donde volará hasta una altitud de 100 kilómetros antes de volver a la atmósfera terrestre y planear hasta posarse en tierra.
Greg Klerkx, experto en la exploración espacial y autor de un libro sobre la NASA, afirma que el proyecto de Branson cuenta con un alto grado de credibilidad. 'Los preparativos para el primer vuelo del SpaceShipOne están dando mucho que hablar en los círculos alternativos de la aeronáutica espacial', dijo. 'La idea de vuelos relativamente baratos al espacio lleva tiempo comentándose. Paul Allen no suele invertir en tonterías'.