Formación y empleo
La oferta cualificada de empleo experimentó en los últimos 12 meses un repunte, tras dos años de atonía y descensos, lo que puede interpretarse como un indicador de consolidación de la recuperación económica general. Sin embargo, la oferta, analizada por Infoempleo, revela algunos cambios en el comportamiento del mercado, así como algunos defectos que deben ser corregidos para explotar plenamente la capacidad de crecimiento económico.
Llama la atención el sesgo que toma la preocupación de las empresas hacia las funciones comerciales de la gestión de su actividad, consecuencia lógica de una economía que funciona con mercados en competencia y en la que el marketing, la publicidad y la calidad de los productos y servicios son fundamentales para el crecimiento de la facturación. Revela también el repunte en las actividades más directamente relacionadas con el sector industrial, que había tenido un comportamiento pasivo en los últimos años, y sigue recogiendo la pujanza de la actividad constructora e inmobiliaria que genera la inercia del ciclo económico.
Pero resulta preocupante la persistencia de desajustes en los mercados laborales cualificados, en los que las empresas buscan las personas que dirigen su gestión. Así, pese a la fuerte demanda reiterada de personal técnico, especialmente ingeniería y peritajes, sigue reflejándose un déficit de personal disponible, que el sistema formativo debería corregir por la vía rápida. No es normal que se demanden cuatro arquitectos técnicos por cada uno existente en el mercado. Pero tampoco es lógico que haya cuatro licenciados en Derecho dispuestos por cada empleo con esa cualificación exigida. La universidad, la empresa y la Administración deben orientar la formación universitaria y técnica hacia los mercados efectivos, y no dilapidar recursos en oferta hacia mercados saturados.