El Tribunal de la UE rebate a Bruselas en dos casos españoles
El departamento de Competencia de la Comisión Europea sufrió ayer dos nuevos reveses judiciales ante la corte de Luxemburgo, cuando sólo falta mes y medio para que su actual responsable, Mario Monti, pase el testigo a la comisaria holandesa Neelie Kroes.
La siderúrgica Aristrain, multada en 1994 con 10,6 millones de euros por su participación en un cartel del mercado europeo de vigas, vio ayer rebajada la multa hasta 2,5 millones. La Comisión había incluido en el cálculo de la sanción la facturación de una filial de Aristrain, también implicada en el cartel. Los jueces rechazaron esa acumulación y ayer redujeron la multa.
El Tribunal de Justicia también anuló ayer una decisión de la CE del año 2002 sobre presuntas ayudas de Estado a la ya desparecida empresa de porcelanas y vajillas GEA (Grupo de Empresas Álvarez). Bruselas acusaba al Gobierno español de pasividad ante la repetida morosidad de la empresa con la Agencia Tributaria y la Seguridad Social. Monti consideró que los impagos de la empresa desde 1998 hasta su quiebra en 2001 equivalían a una ayuda y exigió al Gobierno su recuperación. Los jueces no se pronuncian sobre esa equiparación entre impago y ayuda, pero consideran errónea la apreciación sobre la pasividad de las autoridades españolas.