Los precios no ceden en junio y se incrementa el diferencial
El Índice de Precios al Consumo (IPC) aumentó en junio un 0,2% con respecto al mes anterior, con lo que la tasa de inflación se ha colocado en el 3,5%. Por su parte, si omitimos los alimentos no elaborados y la energía, los precios también aumentaron un 0,2%, mientras que la tasa interanual fue del 2,8%. En ambos casos, los incrementos coincidieron con nuestras previsiones y se confirma la significativa aceleración de los precios a lo largo del segundo trimestre del año. El diferencial con respecto a la media comunitaria ha aumentado significativamente y se ha colocado en el 1,1, frente a las seis décimas de finales del año pasado.
Al repunte inflacionista ha contribuido, en gran medida, el encarecimiento energético, cuyo componente ha aumentado un 4,1% en el segundo trimestre. Sin embargo, en junio, su crecimiento ha sido nulo y su tasa interanual ha repuntado hasta el 7,2%. Pero en España, el energético no es el único componente causante de la aceleración de los precios. Los precios industriales no energéticos y los precios de los alimentos están añadiendo a la inflación general alguna décima más de lo previsto. En junio, sus tasas interanuales fueron del 1% y 4,8%, respectivamente, en línea con lo previsto. Por su parte, los precios de los servicios mantienen una tasa inflación alta pero estable, en el rango 3,6-3,8%.
Con estos datos, esperamos que durante lo que resta de ejercicio la inflación discurra entre el 3,4% y el 3,7%, terminando el año al 3,6% y con una inflación media anual del 3,1%. El petróleo cotizará a lo largo del año entre los 35 y los 40 dólares por barril. En la última semana ha llegado a los 38 dólares por barril).