La renta fija a largo se distancia en la clasificación de peores rentabilidades
El gradual ascenso de las rentabilidades a largo plazo en los mercados de renta fija sigue presionando a la baja las ganancias de los planes de pensiones de renta fija a medio y largo plazo. El rendimiento medio de los planes de este tipo es este año del 0,56% y en los doce últimos meses del 0,36%, muy lejos de los demás grupos de planes de pensiones, cuyas ganancias llegan a niveles máximos del 9,36% en el caso de los de renta variable a un año. Cuanto más suben los tipos a largo plazo, menos valor tienen las carteras de planes de pensiones y, por lo tanto, más bajas son sus rentabilidades, que representan alrededor del 10% de los patrimonios gestionados por el conjunto de los planes de pensiones españoles.
Las ganancias más sólidas siguen ofreciéndolas los planes de renta variable aunque en este segmento del mercado los patrimonios son bastante modestos. El partícipe tiene una elevada aversión al riesgo y cuando ha entrado en la renta variable lo ha hecho a través de los planes de tipo mixto. Los que tienen predominio de renta variable presentan este año las mejores rentabilidades, junto a los estrictamente bursátiles. Los planes de renta variable mixta han acumulado en lo que va de año un 1,30% de rentabilidad y un 5,70% en los últimos doce meses, mientras los de renta variable en sentido estricto ganan un 2,15% en lo que va de año y un 9,36% en los doce últimos meses. Los últimos movimientos en las Bolsas no han modificado de forma sustancial el nivel de ganancias en los fondos y planes bursátiles, que mantienen una línea de notable estabilidad desde mediados del mes de mayo.
Las principales variaciones se han producido en los de renta fija, en los que no se puede descartar un empeoramiento ya que el gradual aumento de los tipos oficiales, tendencia a la que se incorporará en unos meses el Banco Central Europeo, permite suponer un aumento de los tipos largos y, por tanto, una mayor debilidad en este tipo de planes.