Fomento quiere llevar el AVE a los grandes puertos y aeropuertos
¿Qué hay de lo mío? Magdalena Álvarez confesó ayer en el Foro Cinco Días que esta es la frase que más oye desde que asumió su responsabilidad en Fomento. A su paso 'por los largos pasillos del Congreso de los Diputados' los padres de la patria de su partido y de los de la oposición se le acercan y siempre le preguntan '¿Qué hay de lo mío?', refiriéndose cada cual al último proyecto o promesa estrella de su ciudad o su comunidad.
En el marco del Foro, Álvarez se enfrentó ayer con una nutrida representación de empresarios cuya actividad depende, en mayor o menor medida, de concursos, licitaciones, fondos y decisiones que gestiona Fomento. Los asistentes escrutaban cada palabra de la ministra esperando que de alguna pudiera deducirse una respuesta a la imperiosa cuestión; '¿Qué hay de lo mío?'.
Álvarez delimitó su terreno de juego al afirmar que 'lo peor es no pagar una obra que se ha ejecutado, pero también es malo prometer actuaciones que nunca se realizarán'.
La ministra, no obstante, se permitió desgranar otro retazo de una política de infraestructuras que poco a poco, y con el paso de los días y las intervenciones públicas, va dando a conocer. Aseguró que es voluntad de su ministerio dotar de conexiones con ferrocarril de alta velocidad los puertos y aeropuertos de las ciudades a las que llegan las líneas del AVE. Mencionó expresamente a la terminal aérea del aeropuerto del Prat, y en su intervención quedó implícita la impresión de que también rondaban su cabeza los aeropuertos de Madrid y Málaga.
En el turno de preguntas se requirió su veredicto sobre el contencioso entre las diferentes alianzas aéreas sobre la ubicación en las nuevas instalaciones del aeropuerto de Barajas. Y Magdalena Álvarez, se dirigió a los altos ejecutivos de compañías aéreas que estaban próximos, Iberia y Air Europa entre otras, y bromeó: 'podría adivinar quien me ha hecho esta pregunta'. Otra vez el '¿qué hay de lo mío?'.
La titular de Fomento describió la situación de la macro renovación del aeropuerto de Barajas de manera desgarrada: 'El presupuesto inicial se ha multiplicado por dos, existen graves retrasos en la ejecución y todos los usuarios, viajeros y compañías aéreas, están insatisfechos. Creo que hay mejores maneras de gastar 6.000 millones de euros?'.
Tras la descripción del 'desastre', Álvarez afirmó que 'vamos a deshacer el entuerto, pero para ello es imprescindible que se calmen los ánimos'. Dejó la decisión del reparto salomónico de los espacios para más adelante, pero prometió que trabajará por una solución que deje satisfechas a todas las partes.
Sobre futuro modelo de gestión del ferrocarril fue absolutamente taxativa: 'aplicaremos la Ley Ferroviaria' tal como fue aprobada en el parlamento durante la etapa del gobierno del Partido Popular. No se contempla aplicar un esquema de 'holding' para mantener ligadas de algún modo los dos entes empresariales que surgirán de la reforma, el ADIF y Renfe Operadora.
Álvarez aseguró que, junto a los grandes proyectos, es necesario ocuparse de solucionar problemas de planificación en las líneas del AVE que parecen menores, pero que restan eficacia al sistema. Puso como ejemplo la línea de Valladolid que llega a Madrid por la estación de Chamartín y no tiene conexión con la terminal de Atocha en la que desembocan los AVE de Sevilla y Barcelona.