Los precios moderan su avance en junio y elevan una décima el IPC
La inflación vuelve a repuntar en junio, pero menos. Según muestra el indicador adelantado del IPC armonizado (IPCA) español que ha publicado hoy el Instituto Nacional de Estadística, los precios subieron una décima este mes, elevando la tasa interanual al 3,5%. Serían niveles desconocidos desde marzo de 2003, pero los economistas coinciden en que podría ser el techo del año, favorecida en lo venidero por un efecto estadístico interanual.
Tras haber tocado suelo en el primer trimestre en el 2,1%, la inflación comenzó en abril una senda ascendente espoleada por la fuerte revalorización acumulada por el precio del petróleo. Para la mayoría de los analistas, la tranquilidad llegaría con una hipotética banda de cotización para el barril de crudo situada en 30-32 dólares. Precisamente en junio el barril de brent ha bajado de 34 dólares, un precio no visto desde hace dos meses, quedando atrás aquel máximo histórico que rozó los 40 dólares y puso en peligro el crecimiento de las principales economías del mundo y el control de la inflación.
Así, la subida del IPC en junio era previsible, dada además la combinación del aumento de los precios de los carburantes en la primera mitad del año y su fuerte caída en el mismo periodo del ejercicio pasado, tras la invasión de Irak. Sin embargo, la frenada en su avance es un dato alentador. En mayo pasado, la tasa interanual aumentó siete décimas, situándose en el 3,4%. La tasa de variación intermensual, es decir, de abril a mayo, fue del 0,6%.
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, se ha mostrado confiado en que la mejor evolución registrada por el precio del petróleo, que hoy ha marcado su precio más bajo en dos meses en Londres (33,32 dólares) beneficie a la inflación "de aquí a final de año".
Según el ministro, hasta que no se difunda el dato definitivo no se podrá analizar la evolución de los distintos componentes, pero opina que el "ligerísimo incremento" de junio va en la línea de los meses anteriores y es coherente con la evolución del crudo.