Francia se resigna a buscar socios industriales para el grupo Alstom
Francia se comprometió ayer con la Comisión Europea a buscar socios industriales, sin capital público francés, que garanticen la viabilidad del grupo Alstom. Bruselas concede un plazo de cuatro años para cumplir una condición que permitirá al Gobierno francés activar un plan de rescate de la compañía valorado en más de 4.000 millones de euros.
Los intensos contactos de las últimas horas entre Bruselas y París para desbloquear el expediente de Alstom concluyeron finalmente en la mañana de ayer con un compromiso del ministro francés de Finanzas, Nicolas Sarkozy, que satisface las exigencias del comisario europeo de Competencia, Mario Monti. El Gobierno galo ha aceptado iniciar la búsqueda de socios industriales que participen en una buena parte de la producción del grupo Alstom, especializado en tecnología para infraestructuras de transporte y energía.
La entrada de empresas rivales en el capital o la organización del grupo puede ser la antesala de su división, una consecuencia que Sarkozy intentaba evitar. Pero Monti consideraba imprescindible la venta de activos y la participación industrial de otros socios como contrapartida al plan de rescate con fondos públicos que París pondrá en marcha para salvar el grupo.
El negocio del emblemático grupo galo (entre cuyos éxitos se encuentra el desarrollo del TGV, el tren ultrarrápido francés) resulta atractivo para rivales como la alemana Siemens, la japonesa Mitsubishi o la estadounidense General Electric.
Las alianzas afectarán a partes significativas del negocio de Alstom
Bruselas anunció ayer que 'tras una conversación telefónica que ha tenido lugar esta mañana entre Sarkozy y Monti se ha acordado que, en el marco de las obligaciones que asume el Estado francés para obtener la autorización de la Comisión a la ayuda de estado a Alstom, habrá un compromiso sobre las asociaciones industriales del grupo'.
El acuerdo entre ambas administraciones se produce apenas 24 horas antes de que Alstom presente sus resultados anuales a la junta general de accionistas. Los resultados semestrales de noviembre arrojaron unas pérdidas de 624 millones de euros, una caída de la facturación del 9% (hasta 8.900 millones de euros) y una reducción del 23% en la lista de pedidos. La deuda se situaba en 4.500 millones de euros, a pesar de que la venta en los meses anteriores había ingresado en caja 2.500 millones de euros.
En esta tesitura, el fin de la incertidumbre sobre el programa de ayuda pública puede contribuir a que el grupo mejore su posición ante acreedores e inversores. Desde agosto del año pasado París mantiene en suspenso, como consecuencia del veto de Monti, una intervención que, tras sucesivas ampliaciones, asciende ya a 4.275 millones de euros.
'El Estado se compromete a que la empresa Alstom concluya uno o varios acuerdos industriales en un plazo de cuatro años', ha sido la cláusula que Sarkozy ha tenido que aceptar a cambio del visto bueno comunitario. 'Estas asociaciones afectarán a partes significativas de la actividad de Alstom', añade el texto consensuado, en el que Monti se ha cuidado de especificar que 'salvo que la Comisión lo autorice previamente, estas asociaciones no incluirán a empresas controladas por el Estado francés, de iure o de facto'.
La precisión tiene como objetivo dejar fuera de los aspirantes a Areva, el grupo francés de energía nuclear participado por capital público. Bruselas extrema así las precauciones ante el historial de indisciplina que el Gobierno de Jacques Chirac presenta en materia de ayudas de Estado. Monti intenta en vano, desde hace meses, que París recupere 450 millones de euros en subsidios concedidos a Bull, una empresa francesa de tecnología informática. París también obvió las objeciones de la CE cuando anunció su intención, no consumada, de apoyar una línea de crédito de 9.000 millones de euros para France Telecom.
Los funcionarios comunitarios y del Estado francés se afanan ahora en redactar la letra pequeña del acuerdo sobre Alstom. En un expediente tan errático, ni siquiera se puede descartar que, tras la junta de accionistas de hoy, el Gobierno galo endurezca de nuevo su posición.
desinversión El grupo debe vender activos por valor de 1.500 millones
l El acuerdo entre París y Bruselas sobre el programa de ayudas a Alstom obligará al grupo industrial 'a ceder una parte de su cifra de negocios de en torno a los 1.500 millones de euros', según indicó ayer el ministro francés de Industria, Patrick Devedjian, a la emisora de radio Europe 1 .l 'Lo que queremos ceder es aquella parte que no menoscabe la viabilidad de la empresa', subrayó Devedjian. El ministro insistió en que el objetivo continúa siendo 'evitar el desmantelamiento' del grupo.l Alstom ya se ha deshecho durante los últimos meses de activos (sobre todo, en el negocio de turbinas) por valor de 2.500 millones de euros. El grupo Areva adquirió el área de transmisión y distribución de energía, valorado por Alstom en 950 millones de euros.l El objetivo de Alstom era vender activos por valor de otros 500 millones de euros antes marzo de 2005.