Política y negocios
El presidente de Argentina, Néstor Kirchner, continúa con su política de tira y afloja con las empresas extranjeras que tienen intereses en su país. Ayer, apenas una semana después de acusar de 'extorsión' a Repsol YPF, tendió la mano a la petrolera y la invitó a entrar en la empresa pública energética que tiene en cartera. Eso sí, después de reconocer que, 'tras las presiones necesarias', Repsol YPF 'va a aportar la producción que necesitamos'. Es cierto que Argentina está en medio de una crisis energética importante y que sus políticos, empezando por el presidente, deben poner toda la carne en el asador para solucionarla. Sin embargo, no parece lo más apropiado 'presionar' de esa forma a empresas que, como Repsol YPF, han efectuado inversiones considerables en Argentina. Mezclar política y negocios sin la prudencia necesaria es peligroso y, muchas veces, contraproducente para quien hace el cóctel.