España afronta la ampliación al Este con una presencia inversora testimonial
A falta de cinco días para la ampliación de la UE al Este, la inversión directa española en los países candidatos apenas alcanza el 2% del total mundial en la zona. Aunque en 2003 creció un 10%, España continúa en el furgón de cola, muy lejos de Alemania, Italia y Francia.
El próximo sábado, día 1 de mayo, arranca la ampliación de la UE a diez países de la Europa central y oriental, con un enorme desinterés de las empresas españolas por la región. Mientras que los principales socios comunitarios (Alemania, Francia e Italia) han ido aprovechado con decisión las múltiples oportunidades de negocio de las economías emergentes de estos países, España se ha mantenido en el furgón de cola.
Los últimos datos que acaban de elaborarse (informe Litexco), son demoledores. A pesar de que en 2003, la inversión española en la zona ha crecido un 10% (un porcentaje apreciable), la cantidad es irrisoria, ya que apenas alcanza en su conjunto los 69 millones de euros, si se exceptúa los fondos llegados a Hungría el pasado ejercicio.
La inversión española en 2003, por más que haya aumentado, sólo viene a confirmar la tradicional escasa presencia de las empresas nacionales en la zona. Y es que en los últimos diez años (periodo 1993-2003), las empresas españolas no han logrado absorber más del 2% de la inversión mundial en el área (170.000 millones de euros). En algunos casos como las repúblicas bálticas (Estonia, Letonia y Lituania), en donde suecos, daneses y finlandeses están entrando en cascada, el porcentaje español no llega al 0,1%. Países de menor población y peso que España en Europa le han tomado la delantera, acaparando por sí solos el 12,3% de los fondos llegados a Bulgaria (caso de Grecia), el 17,6% de los enviados a Rumanía (caso de Holanda) o el 32,3% de los recibidos por Eslovenia (caso de Austria). Todo ello sin contar, con el creciente papel de los gigantes europeos (Francia y Alemania), a la que se ha sumado Italia, en los últimos años. De hecho, Italia ya es el segundo inversor (10,6%) en países como Bulgaria.
Incluso países de menor peso como Holanda han tomado la delantera
'Las empresas españolas deberían aprovechar la alta cualificación técnica de los profesionales del Este y las oportunidades en campos como las infraestructuras y las nuevas tecnologías', indica a Cinco Días Isabel Pardos, consejera de Litexco, un grupo de inversión suizo con fuerte implantación en la zona y que elabora estadísticas sobre la región, con datos oficiales.
También en comercio
La falta de interés no sólo se circunscribe a las inversiones directas, ligadas a un mayor conocimiento del mercado y con una motivación de permanencia a largo plazo. También tienen su traslación en los meros intercambios comerciales.
El primer socio comercial de los candidatos, Polonia, es receptor de productos y servicios españoles por 1.400 millones de euros, muy por debajo de los 14.300 millones que venden las empresas alemanas, líderes en ventas con el 24,4% de las importaciones polacas.
En el caso de Bulgaria y Rumanía (está previsto que se incorporen a la UE a partir de 2007), los incrementos comerciales de España cosechados en 2003 respecto al ejercicio anterior han sido importantes (27% y 36%, respectivamente), pero, una vez más, con ventas poco significativas,que, apenas superan los 500 millones de euros en su conjunto.