Repsol provisiona 162 millones por el oleoducto de Ecuador
El megaproyecto de oleoducto de crudos pesados (OCP) que la petrolera Repsol ha puesto en marcha en Ecuador ha dejado en las cuentas de cierre de 2003 de la petrolera una carga de 162 millones de euros en concepto de provisión por el cambio de valoración de los compromisos de transporte relacionados con dicha infraestructura.
El nuevo oleoducto atraviesa la cordillera de los Andes y posibilita la exportación de crudo desde la aislada zona amazónica ecuatoriana hasta el Pacífico.
Los embarques de crudo de esos yacimientos se destinan básicamente a los mercados de Chile, Perú y la costa oeste de Estados Unidos.
El OCP fue construido por un consorcio de empresas privadas, del que Repsol YPF tiene el 29,66%, y ha requerido una inversión total por 1.500 millones de dólares. Con esta nueva red se podrán evitar los cuellos de botella que hasta ahora se han producido en el transporte y distribución de petróleo en ese área de Suramérica, que sólo contaba con un único oleoducto de propiedad estatal.
Esos 162 millones fueron contabilizados como dotaciones extraordinarias para pérdidas futuras por Repsol en sus cuentas de cierre de 2003, según figura en la memoria de las cuentas anuales de la petrolera.
Fondo de fidelización
Además, Repsol realizó también una dotación extraordinaria de 27 millones de euros para cubrir el incremento de compromisos en los planes de pensiones de Maxus Energy Corporation, filial de YPF; efectuó provisiones para litigios por 35 millones de euros; dotó 30 millones para grandes reparaciones, y efectuó una dotación a fondos de fidelización de personal clave de la organización por 28 millones de euros, según figura en la memoria.
Repsol YPF también realizó provisiones de carácter medioambiental por importe de 28 millones con cargo a resultados. Pese a ello, la cifra total provisionada para riesgos medioambientales ha descendido en el conjunto del año de 111 a 84 millones de euros.
De ese saldo de 84 millones a cierre de año, hay que destacar unos 53 millones de euros correspondientes a los riesgos medioambientales relacionados con las operaciones realizadas en su día por la antigua filial de productos químicos de Maxus Energy Corporation, Diamond Shamrock Chemicals Company, con anterioridad a su venta en 1986 a Occidental Petroleum Corporation.
Asimismo, ese total incluye 18 millones de euros correspondientes a provisiones para remediación medioambiental de YPF.