Bush confía en que EE UU creará 2,6 millones de empleos este año
En temporada de primarias y con el senador John Kerry dibujándose como claro vencedor del Partido Demócrata, el presidente estadounidense ha lanzado hoy un mensaje económico optimista, basado en un crecimiento sostenido y acompañado de una fuerte creación de empleo. El Informe Económico de la Casa Blanca promete 2,6 millones de puestos nuevos, que compensen los 2,2 perdidos durante el mandato de Bush.
La economía estadounidense compensará su alto nivel de desempleo con 2,6 millones nuevos puestos de trabajo este año, según ha pronosticado hoy la Casa Blanca e informa Reuters. El propio presidente George W. Bush se aferra a esa promesa y a la buena marcha económica para ganar algo de terreno en su lucha por la reelección en noviembre.
El Informe Económico del Presidente, divulgado hoy por la Casa Blanca y de 412 páginas de longitud, presenta este año una perspectiva mucho más optimista de lo que se pronosticaba el año pasado, cuando el desempleo se situó en el 6,1%. El mes pasado, los felices anuncios de una tasa de paro del 5,6% y un aumento del PIB en 2003 por encima del 6% sirvieron para renovar la confianza. No así entre los demócratas, que no cesan de reprochar a Bush una carencia de estímulo en el empleo.
Se calcula que, desde que llegó a al poder, EE UU ha perdido 2,2 millones de puestos de trabajo y, el año pasado, el saldo fue negativo y de 53.000 frente a 1,7 millones que esperaba crear el presidente. Una vez más, el documento expuesto hoy confía en revertir la balanza a la zona positiva, con un crecimiento del número de trabajadores no agrícolas hasta 132,7 millones en 2004, frente a los 130,1 millones de 2003.
Desde que el 19 de enero se abrió la temporada de elecciones primarias, en Iowa, el presidente ha viajado a varios de los estados donde se celebraban estos comicios en lo que parece ser un intento de contrarrestar las críticas demócratas. Hoy, en una intervención en Misuri, Bush ha insistido en que mantendrá la prosperidad para hacer permanentes los recortes impositivos e intentado eclipsar así las duras críticas recibidas en torno a la guerra en Irak y el déficit presupuestario.