Izar redujo un 75% sus pérdidas en 2003 gracias a la entrega de 11 barcos
Las incertidumbres sobre el futuro de Izar se mantienen y puede acentuarse este año pese a la reducción de pérdidas que registró en 2003 la compañía controlada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). No hay, de momento, acuerdo con la plantilla sobre el convenio; falta, todavía, poner en marcha la aplicación del expediente de regulación como consecuencia de la subactividad en las factorías civiles y, quizá lo más importante, no ha contratado la construcción de un solo buque en las plantas pertenecientes a la antigua Astilleros Españoles (AESA).
Izar, en cualquier caso, se ha aplicado a la hora de hacer una parte de los deberes encomendados para configurar un grupo de construcción naval que pueda sobrevivir en Europa ante el acoso (precios por debajo de coste, plazos, etcétera) de los astilleros coreanos. Así, según aseguraron ayer fuentes de Sepi, su único accionista, la previsión para 2003 era perder 89 millones de euros y cerró el ejercicio con 30 millones de resultados negativos, con una facturación de 1.735 millones, frente a los 1.583 millones de 2002.
Los buenos resultados -los números rojos han ocupado históricamente un lugar preferente en su cuenta de pérdidas y ganancias- se produjeron como consecuencia de una política de reducción de costes, de las sinergias de grupo (compras, estrategia, etc.), por la integración en Izar de las plantas militares y civiles y de la entrega de barcos en los plazos previstos, lo que evitó penalizaciones por incumplimiento de contrato. Sin embargo, uno de los capítulos más importantes fue el ingreso por la entrega de 11 buques (una fragata, dos gaseros, cuatro dragas, dos remolcadores, un quimiquero y una plataforma petrolífera).
Este escenario de facturación y resultados no se producirá en 2004.
Crisis Las recetas de la SEPI para sobrevivir en un mercado incierto
l Paz laboral. SEPI apuesta por el acuerdo con los sindicatos para aprobar un convenio que beneficie a las partes y a la empresa y que sirva de base para la puesta en marcha de un expediente de regulación de empleo para parte de la plantilla de los astilleros civiles para aliviar la subactividad.l Integración del sector. El grupo público pretende una mayor integración del sector en Europa que pueda desembocar en un consorcio que haga frente a la competencia coreana. Además defiende su diferencia tecnológica respecto de otros astilleros para encontrar su nicho de negocio.