González defiende un consejo más reducido
Francisco González no despejó ayer las dudas sobre el posible nombramiento de un vicepresidente en la próxima junta de accionistas del banco, que se celebrará el próximo 28 de febrero, tras la salida de Jesús María Caínzos por discrepancias con el mismo.
El presidente de la entidad se limitó a afirmar que en el BBVA hay un presidente y un consejero delegado, y que en el caso del banco sus estatutos no recogen la obligación de contar con un vicepresidente. 'Es cuestión de modas tener o no vicepresidente', subrayó. Aunque sí confirmó que la idea del BBVA es ir a un consejo más reducido tras las próximas salidas de Jaume Tomás y de Gregorio Marañón. Esta idea está basada en los últimos informes de gobierno corporativo internacionales. Los estatutos del banco fijan el número en 18, aunque con las actuales salidas se queda en 13.
Como ya lo hicieran el presidente del Santander, Emilio Botín, y el de La Caixa, Ricardo Fornesa, Francisco González también eludió pronunciarse sobre los programas económicos tanto del PP (partido con el que llegó a la presidencia de Argentaria) como del PSOE (en el que ha colaborado el antiguo responsable del servicios de estudios del BBVA, Miguel Sebastián) ante las próximas elecciones generales.
González se limitó a decir, no obstante, que 'tenemos que estar orgullosos' de la evolución económica de España, porque 'lleva 25 años creciendo', aseguró. Y añadió que el crecimiento económico español 'no se debe a un solo partido político', sino a un conjunto de razones que van desde la actuación de la Corona hasta la transición, que se hizo 'en un momento importante'.
Atentos a
Sueldos del consejo. González confirmó que el BBVA publicará los sueldos individualizados de cada uno de los miembros del consejo. González dijo, no obstante, que más importante que saber lo que cobran los consejeros es que dos tercios del consejo lo forman independientes.