La caída de empleo en la industria se concentra en el textil y la electrónica
La industria española está sufriendo un silencioso y lento proceso de crisis y de descapitalización. Cada vez está más claro (y así lo difunden los responsables económicos del Gobierno) que España se está convirtiendo enteramente en una economía de servicios en claro detrimento del peso de la industria.
El síntoma más claro son los casi 100.000 empleos que ha recortado el sector industrial español sólo en el año 2003 y todos en la industria manufacturera.
Las ramas de actividad más perjudicadas por estos recortes de plantilla fueron el sector textil, que se ha quedado con 37.000 empleos menos, lo que supone una fuerte caída del empleo del 15%. La industria de material y equipo eléctrico y óptico, que perdió 22.000 puestos de trabajo (un 12,6% menos), y la de madera y corcho, 16.700 empleos (13,5%).
'Los ajustes laborales se dirigen únicamente al incremento de rentabilidades', según CC OO
¿Por qué pierde peso la industria? No hay una sola causa sino un conjunto de condiciones adversas que se están traduciendo en una cascada de recortes de plantilla y desmantelamiento de compañías.
Un análisis elaborado por la Federación Minerometalúrgica de Comisiones Obreras concluye: 'Cabe presumir que los ajustes laborales que se están llevando a cabo en las empresas industriales españolas, en un contexto de rentabilidades positivas y sostenidas, se dirigen exclusivamente al incremento de las rentabilidades y no a decisiones de reconversión productiva o tecnológica, a la vista de las moderadas inversiones que se están produciendo'.
La falta de inversión empresarial destinada a la mejora productiva es, por lo tanto, una de las causas que lleva a los gestores a recortar los puestos de trabajo para optimizar la rentabilidad. Algo que han conseguido en la industria por esta vía.
Otro de los motivos que están estrangulando el sector industrial es el elevado grado de internacionalización de sus intercambios comerciales y, especialmente, hacia Europa (tres cuartas partes del comercio industrial español tiene este destino u origen). Esto, que no ocurre con el resto de las actividades económicas españolas, ha hecho que la industria se resienta con la llegada a la UE de los 10 países candidatos de la Europa del Este.
El más que previsible incremento de los intercambios comerciales industriales entre estos países y el resto de la UE, junto a sus inferiores costes laborales, están provocando un proceso de sustitución de las exportaciones españolas hacia la Unión por productos industriales fabricados en estos países. Además, continuará la deslocalización de las empresas multinacionales implantadas en España hacia los Estados del Este, que no ha hecho más que empezar.
La internacionalización de la industria española hace que la incertidumbre de la economía mundial hipoteque su crecimiento futuro, según ha alertado el Banco de España.
Ejemplos recientes en España
1 Sólo en la Comunidad Valenciana, un total de 23 empresas textiles presentaron en 2003 expedientes de extinción o suspensión de empleo que afectaron a cientos de trabajadores.2 Recientemente, las multinacionales Samsung y Philips anunciaron que cerraban sus fábricas de Barcelona para trasladar la producción a otros países. En el caso de Samsung, trasladará su fábrica a Hungría, lo que supone el despido de 400 personas. Philips recortará el empleo de 140 trabajadores con este cierre. Otras empresas que han abandonado España y han desplazado su producción a otros países son Alcatel, Ericcson, Siemens o Hewlett-Packard.3 En julio de 2003 Iberdrola pactó un expediente de regulación de empleo (ERE) para 3.168 trabajadores hasta 2006. A pesar de que esta operación costará a la empresa 515 millones de euros, le ahorrará a la compañía 210 millones de euros en su masa salarial.