Hollywood pierde audiencia
Sostener las cifras récord de 2002 en la taquilla estadounidense ha sido imposible en 2003. A pesar de que la última entrega de El señor de los anillos y la tradicional puesta en pantalla de películas con posibilidades de Oscar a final de año estén generando colas en las puertas de los cines, éstas dan una impresión engañosa de lo que ha sido el año recién acabado. De acuerdo con las estadísticas elaboradas por Nielsen EDI, las ventas de entradas fueron de 9.170 millones de dólares, un 1% menos que el récord conseguido en 2002.
El listón estaba alto, pero en la frialdad de la estadística, que también recogen otras empresas, se observa que es la primera vez desde 1991 que no se bate el año anterior.
Los datos de Nielsen muestran que esta caída se produce cuando los precios de las entradas han subido en el país, pasando de una media de 5,80 dólares en 2002 a 6,04 dólares el año pasado. La media se queda en ocasiones corta, ya que en grandes ciudades como Nueva York hace años que ir al cine cuesta 10 dólares.
Pero el año pasado parte de la audiencia se ha quedado en casa. En 2002 se vendieron alrededor de 1,6 millones de entradas, mientras que en 2003 la cifra rondaba los 1,5 millones. Pese a la caída, las cifras permiten el optimismo al convertirse 2003 en el segundo año con mayor nivel de audiencia en algo más de dos décadas. Además, cuatro estudios, Disney, Sony, Warner Brothers y Universal, han conseguido ingresos superiores a 1.000 millones de dólares, que también es un récord.
El gran fiasco del año 2003 han sido películas que estaban destinadas a ser éxito como Hulk, de Ang Lee, que no consiguió atraer al cine a los seguidores de cómics, pero sobre todo en el menor gancho de las 34 continuaciones estrenadas. Las segundas partes, como el progresivo desvanecimiento del fenómeno The Matrix, Legalmente Rubia o Los Ángeles de Charlie, han recaudado solo un 3% más que las 22 de 2002.
Apuestas y sorpresas
Buscando a Nemo y Piratas del Caribe han sido las sorpresas del año pasado y son la primera y segunda película más vista, respectivamente. Con ellas, los estudios Disney han dado realce a un año en el que todas las apuestas seguras se hacían en la tercera entrega de El señor de los anillos: el retorno del rey (ha sido la tercera película del año por recaudación cuando fue estrenada el 17 de diciembre), la segunda y tercera parte de The Matrix, y las que optan a los Oscar, aunque algunas como Mystic River se han quedado en el puesto 45 por recaudación. Para este año las esperanzas de conseguir récords se depositan en el tercer Harry Potter, Spider-Man II, Catwoman y la última e inquietante película de M. Night Shyamalan (El sexto sentido), que vuelve con The Village.