El Gobierno revisará las condiciones del UMTS para facilitar su lanzamiento
El ministro de Ciencia y Tecnología, Juan Costa, ha anunciado hoy que el Gobierno "concretará y actualizará" en los próximos meses las condiciones de explotación de la telefonía móvil UMTS, con el objetivo de asegurar que "todas las operadoras" lancen sus nuevos servicios este mismo año. Costa, que hoy hizo balance de las actuaciones de su departamento, ha asegurado que 2004 será ¢el año del lanzamiento de la telefonía de tercera generación".
El Ministro ha asegurado que "confía" en que todos los operadores con licencia UMTS (la tecnología que permite la transmisión de contenidos multimedia a través de telefonía móvil) comercializarán sus servicios antes de finalizar el ejercicio, incluida Xfera, que todavía no ha iniciado su actividad comercial.
Sin embargo, en estas declaraciones realizadas en conferencia de prensa, no ha abundado en qué va a consistir esta ¢actualización¢. Tan sólo ha dicho que "se mantendrá de manera general los criterios iniciales" de inversión y cobertura de población" de los servicios, y añadió que el Ejecutivo también permitirá a las operadoras compartir sus redes.
Liberalización
Asimismo, Costa ha expresado su satisfacción por haber logrado en 2003, asegura, la plena liberalización del sector de las telecomunicaciones, de la que dijo se han beneficiado el conjunto de los usuarios a través de la caída de las tarifas. Según datos provisionales, los precios de las llamadas a móviles cayeron en 2003 el 9,5%, después de que bajaran el 16% en 2000, el 7,7% en 2001 y el 11,8% en 2002.
El Ministro también ha destacado que la tasa de penetración de la telefonía móvil se situó al cierre del año en el 88% de la población española, frente a sólo el 81% de media de la Unión Europea (UE).
Respecto a Internet, Costa asegura que España cuenta con 9,8 millones de usuarios, lo que representa el 28% de la población española mayor de 14 años, una cifra notablemente por debajo de la media europea. En cambio, según sus datos España se ha situado ya como el cuarto país de la UE por líneas de banda ancha de Internet, al haber cerrado el año con un total de 2,2 millones de conexiones, de las que 1,6 millones corresponden a ADSL, y las 600.000 restantes a otro tipo de tecnologías.