El Gobierno, dispuesto a allanar el camino para que Xfera pueda operar
Las conversaciones que mantienen el Ministerio de Ciencia y Tecnología y Xfera no pretenden eliminar los compromisos asumidos en el concurso, pero sí suavizarlos o retrasarlos de forma que puedan ser cumplidos en el nuevo escenario de la tecnología UMTS y de los planes de la operadora. Así lo han reconocido fuentes del ministerio y de la compañía, que aseguran que el acuerdo puede ser cuestión de semanas.
Los aspectos más problemáticos de los compromisos son la cobertura, el despliegue y la inversión. El nuevo plan de negocio que está definiendo Xfera es mucho más conservador en estos apartados y por ello necesita el visto bueno del Gobierno para que no les sean ejecutados los avales por incumplimiento del concurso.
Fuentes del ministerio aseguran que el Ejecutivo es proclive a la suavización de los compromisos para que Xfera pueda salir al mercado, pero no a la cancelación. Tampoco es eso lo que pretende la operadora, que reconoce la importancia vital de las conversaciones. Según medios de la compañía, los accionistas todavía no han tomado la decisión de descongelar o no el proyecto, pero un nuevo marco de obligaciones sería determinante para adoptar una postura.
A la espera del resultado de los contactos con el Gobierno, fuentes cercanas al Ministerio de Ciencia y Tecnología y a Xfera explican que la operadora está dando ya otros pasos que permitan su deshibernación.
En este sentido, las mismas fuentes apuntan a que Xfera ha retomado las negociaciones con sus dos suministradores, Ericsson y Nortel, para llegar a un acuerdo de financiación de las infraestructuras. También mantiene conversaciones con el resto de las operadoras de móvil, Telefónica Móviles, Vodafone y Amena, para usar su red de GSM y para compartir emplazamientos en las infraestructuras de UMTS.
La burbuja
Las licencias de UMTS se concedieron en marzo de 2000, una fecha que coincidió con el máximo bursátil de las empresas de telecomunicaciones y con la burbuja tecnológica en pleno desarrollo.En ese momento, multitud de operadoras y de socios de todos los sectores estaban dispuestos a apostar por el nuevo móvil, en un intento de reeditar el éxito de Acciona en Airtel. Los compromisos que asumieron los candidatos fueron billonarios.
La realidad
Xfera, respaldada por ACS y FCC, ganó la ansiada cuarta licencia de UMTS. Jazztel, Deutsche Telekom, Uni2 y Ferrovial se contaron entre los perdedores. Xfera se comprometió a avalar compromisos por valor de 3.000 millones de euros.La burbuja estalló poco después de la concesión de las licencias. Las fuentes de financiación se secaron, el UMTS empezó a mostrar su peor cara y los socios ajenos al negocio pusieron en duda su inversión.