McLane International vende a Lekkerland su 35% en la filial española
Tras la salida la semana pasada de Carlos Marina como director general y la incorporación de Pedro Giménez al cargo, McLane España ha vuelto a dar otro golpe de efecto. La multinacional alemana Lekkerland ha adquirido a McLane International el 35% que tenía en la filial española; con ello, Lekkerland se convierte en el socio mayoritario con el 70% de las acciones. El otro 30% sigue en manos de EBF, el fondo de inversión de la familia Bernat, propietaria de Chupa Chups.
Fuentes de McLane España señalaron que el objetivo de Lekkerland, principal distribuidor de tabaco de Europa, es aprovechar la experiencia de la compañía española en el sector de la restauración (distribución a bares, restaurantes, tabernas) para implantar este negocio en otras filiales europeas.
McLane España, que en 2002 facturó 168,4 millones de euros, con un beneficio neto de 839.000 euros, logra el 70% de la facturación con la distribución de alimentos y otro tipo de productos a cadenas especializadas en comida rápida. El 29,5% de su negocio proviene de la distribución a las tiendas de conveniencia, mientras que sólo el 0,5% es por la distribución de tabaco, precisamente la actividad en la que es líder Lekkerland.
McLane España mantiene desde hace años un contencioso con Altadis porque la tabacalera no le suministra productos para su distribución utilizando para ello a su filial Logista.
Con la venta de su porcentaje en España, Drayton McLane, hasta ahora presidente de la filial, se queda sólo con las compañías de Portugal y Polonia, ya que el negocio en EE UU se lo vendió a Wal Mart hace 11 años, aunque retuvo el derecho a utilizar la marca en Europa.