Los promotores consideran inevitable la subida de los pisos por la "explosión" de la demanda
La Asociación de Promotores y Constructores (APCE) considera "inevitable" la fuerte subida del precio de la vivienda, dado que la oferta no puede absorber la "explosión" de demanda registrada. Así, el presidente de la patronal de promotores, Guillermo Chicote, explicó que la oferta carece de la flexibilidad que el sector requiere actualmente dada la falta de suelo y la escasa liberalización con que en la prácita cuenta su gestión.
Según la APCE, esta coyuntura se traduce en la ralentización del proceso de producción de nuevas viviendas que atiendan a la demanda y, en consecuencia, en un encarecimiento del suelo, cuyo precio ya supone el 50% del coste total de construcción de una vivienda.
Para la patronal de promotores, esta oferta debe además enfrentarse a una importante y muy diversa demanda integrada no sólo por quienes buscan comprar su primera residencia, sino también por quien pretende trasladarse a un piso mejor, adquirir una segunda vivienda o quien busca en el ladrillo un refugio de inversión dada la escasa rentabilidad que actualmente ofrecen otras alternativas.
La APCE estima que este último grupo de potenciales compradores es responsable de un importante porcentaje de la demanda total de vivienda, cuya cuantía exacta estima necesario determinar con el fin de evaluar la futura demanda de vivienda.
En este contexto, la patronal rechazó que la subida del 91% del precio de la vivienda en los últimos seis años sea responsabilidad de los promotores inmobiliarios, al recordar que la vivienda usada que venden los particulares se encarece en similar porcentaje. Asimismo, la asociación reiteró que la completa liberalización del mercado del suelo y la "intensificación" de la política de vivienda pública es la única solución y alternativa a la carestía de los pisos.
Por ello, solicitó que los terrenos públicos que queden exonerados de su uso se destinen a la construcción de viviendas públicas en alquiler, en referencia a la intención de Defensa de subastar terrenos para costear inversiones en armamento. Según los promotores, las adjudicaciones de estos suelos alcanzarán "precios muy elevados, dada la actual coyuntura del mercado".