El cierre de ocho plantas de automóvil en EE UU afecta a 7.500 empleados
Los grupos estadounidenses fabricantes de automóviles General Motors y Ford cerrarán o venderán ocho instalaciones industriales en Estados Unidos tras obtener la aprobación del sindicato United Auto Workers, según informó ayer el diario The Wall Street Journal.
En términos globales, los cierres de estas ocho instalaciones industriales en Estados Unidos afectarán a 3.000 trabajadores en el caso de General Motors y a 4.500 empleados de Ford.
Dentro de los términos del convenio firmado la pasada semana, y que cuenta con cuatro años de duración, la organización sindical indicó que permite a General Motors cerrar la factoría de Baltimore, que produce furgonetas y cuenta con una plantilla de 1.100 empleados.
El sindicato también aprueba el cierre de la planta de componentes de Saginaw y la venta de la división de General Motors que fabrica motores para locomotoras. Asimismo, United Auto Wolkers también aprueba el cierre de Argonaut Building, organización de Detroit que integra inmobiliarias y almacén fotográfico.
Por su parte, el sindicato aprobó el cierre o la venta de cuatro plantas de Ford. En concreto, la factoría de pick-up en Edison, que emplea a 863 personas; la fábrica de vehículos comerciales ligeros de Lorain, que cuenta con una plantilla de 1.640 trabajadores, así como los centros Vulcan Forge en Dearborn y Cleveland Aluminum Casting en Ohio.
Los principales fabricantes estadounidenses de automóviles han negociado con los sindicatos para reducir la capacidad de sus plantas con el objetivo de aumentar la rentabilidad y responder así a la presión de sus competidores japoneses y europeos.
Tanto General Motors como Ford, las dos más grandes empresas automovilísticas del mundo, redujeron sus ventas en agosto en el mercado estadounidense. La caída de General Motors fue del 8%, mientras que la de Ford fue del 14,9%.