Los signos de recuperación en EE UU alimentan el optimismo de los expertos
Algunos temían que la primera sesión de trabajo en Wall Street tras el periodo vacacional trajera consigo una toma de beneficios que purgara los excesos del verano. Casi fue así. Un nuevo signo de mejora en la economía estadounidense no fue suficiente para alentar las compras y mantener los máximos anuales que el Ibex tocó por la mañana.
Al cierre, la mayor parte de índices europeos firmaron leves alzas y alguno, como el Cac (+0,16%), cerró en máximo del año.
Poco tenían de qué lamentarse los inversores. El índice ISM de actividad industrial arrojó ayer una lectura de 54,7 puntos en agosto, frente a los 51,8 del mes de julio. El dato no sólo superó ligeramente las previsiones -las encuestas apuntaban una lectura de 54 enteros-, sino que por segundo mes se situó por encima de los 50 puntos, el umbral que marca una expansión en la actividad industrial. No gustó el componente referente a la evolución del empleo, que sufrió una leve caída, aunque el resto de referencias, como la producción y los pedidos, subieron.
El índice ISM de actividad industrial en EE UU subió en agosto por segundo mes consecutivo
'Las perspectivas son positivas', señala Mercedes Camacho, jefa de análisis de Safei. 'No vemos ningún peligro que pueda amenazar a la buena marcha de la renta variable si, como se espera, EE UU sigue apuntando una recuperación que tarde o temprano se contagiará a Europa', añadió esta analista.
Jordi Falgueras, responsable del departamento de estudios de Gaesco, considera que los mercados se han librado casi por completo de los elementos que acentuaron la crisis económica que empezó a gestarse a finales de 2000, como la incertidumbre geopolítica. 'Tras el repunte puramente técnico del segundo trimestre, ahora los inversores pasarán a centrarse en las valoraciones', sostiene Falgueras. En este sentido, el experto de Gaesco se muestra convencido de que en los resultados empresariales se va producir un cambio cualitativo en el que los recortes de costes darán paso a una mejora de beneficios por el aumento de la demanda.
Natalia Aguirre, directora de análisis de Renta 4, por su parte cree que lo más importante es que las evidencias de un despegue en la economía estadounidense 'han mejorado sensiblemente el sentimiento de mercado'. Aguirre, al igual que Mercedes Camacho, de Safei, maneja un objetivo para Ibex de 7.500 puntos a finales de año, un recorrido del 4% respecto a ayer, pero que supondría un alza anual del 24%, la mayor desde 1988.
En este contexto, los analistas consultados apuestan por valores con componente cíclico, sean del sector que sean. En el Ibex gustan Amadeus, Acerinox, Indra e Iberdrola, además de Telefónica y el SCH.
Septiembre, un mes negro
Septiembre suele ser un mes nefasto para la renta variable. Las Bolsa sufren en este periodo su particular síndrome posvacacional con el nuevo aluvión de volumen que provoca la vuelta a la actividad de los inversores, un retorno que corrige los movimientos erráticos que el escaso negocio deja en agosto. Asimismo, la sequía de noticias empresariales y de datos económicos de agosto da paso a una lluvia de cifras que, a veces, no son del agrado del mercado.Cifras recopiladas por Ned Davis Research y hechas públicas por Bloomberg, muestran cómo septiembre es el peor mes del ejercicio para el Dow y el S&P 500 de los últimos 50 años, con una caída media del 0,44% y del 1,2%, respectivamente.Pese a que en los últimos años septiembre ha sido especialmente malo y marcado por el recuerdo de los atentados contra las Torres Gemelas de 2001, la mayor posibilidad de que se produzca una caída de la Bolsa en este periodo tiene una explicación lógica. Con el regreso de las vacaciones y la recta final del año a la vista, las empresas analizan la marcha del negocio hasta el momento. Si las perspectivas no son las previstas, este suele ser el mes de las temidas advertencias de beneficios. De acuerdo con Thomson Financial, septiembre es el mes en que el ratio de empresas que recortan sus perspectivas de ganancias respecto a aquellas que los mejoran es el más alto del año. Otra razón es que muchos fondos en EE UU cierran su ejercicio fiscal el 31 de octubre, y si hasta entonces registraban pérdidas, venden en este periodo con la intención de conseguir favores fiscales.'Quizás este año se rompan las estadísticas', sostiene Jordi Falgueras, de Gaesco.