La presión vendedora se ceba en el Nasdaq
Los resultados de Cisco marcaron un antes y un después en el comportamiento semanal de las Bolsas estadounidenses. El gigante tecnológico anunció el miércoles unos resultados que, sin ser peores de lo esperado, no contentaron a Wall Street, que sigue muy exigente con las expectativas de negocio futuro.
La caída de Cisco (-8,05% en la semana) arrastró a todo el sector tecnológico, lo que provocó que las ventas se cebaran en el Nasdaq, que cerró la semana con una caída del 4,17%, mientras que ayer cedió el 0,49%. El Dow, pese a la presión a la que se vio sometido a principios de semana por el sector financiero, subió en el periodo el 0,41% gracias al cierre positivo de ayer (+0,71%).
Aunque Cisco aceleró el jueves las ventas sobre la tecnología, la desconfianza ya rondaba los valores del Nasdaq en las sesiones precedentes. Así, el índice registró ayer su sexta caída consecutiva, algo que no sucedía desde abril del año pasado. También ha resultado crucial el comportamiento de los dos valores presentes en tanto en el Dow como en el mercado tecnológico por excelencia, Intel (-5,88%) y Microsoft (-2,29%) cerraran la semana con pérdidas.
Además, el mercado tecnológico pagó ayer los platos rotos de la advertencia de menores beneficios lanzada ayer por el fabricante de chips Nvidia (-19,69%). Este castigo repercutió negativamente sobre el sector de semiconductores, como fue el caso de Applied Materials (-4,53%) o KLA-Tencor (-3,46%).
La reunión de la Reserva Federal el martes es la cita más importante de la próxima semana.