Al menos 11 muertos en un atentado en Bagdad
Un atentado perpetrado ayer contra la Embajada de Jordania en Bagdad se saldó con al menos 11 muertos y 65 heridos. El ataque se produjo una semana después de que el Gobierno de Ammán concediera asilo a las dos hijas mayores de Sadam Husein. La explosión tuvo repercusiones inmediatas en el mercado del petróleo, donde el precio del barril de brent llegó a subir al nivel de 30 dólares, aunque luego cedió hasta situarse en 29,7.
El ataque constató la falta de seguridad que aún reina en Irak, pese a que las fuerzas de la coalición anglo-estadounidense irrumpieron en la capital del país árabe el pasado 9 de abril. Los terroristas emplearon un camión cargado de explosivos que explotó a las puertas de la Embajada jordana.
Hasta el momento, ningún grupo terrorista ha reivindicado el atentado. El teniente general Ricardo Sánchez, comandante de las fuerzas terrestres de EE UU en Irak, admitió que el de ayer fue el peor desde que el pasado 1 de mayo se proclamó oficialmente el final de la guerra. 'Esto muestra que hay terroristas profesionales operando en este país y que todavía estamos en una zona de combate', declaró Sánchez en rueda de prensa.
Casi simultáneamente al atentado, un vehículo militar estadounidense fue atacado en el centro de Bagdad. En el intercambio de disparos falleció al menos un civil iraquí. Horas antes, dos soldados estadounidenses cayeron en un tiroteo con presuntos guerrilleros leales a Sadam Husein, en un combate que también tuvo como escenario el centro de la capital. Desde el final oficial del conflicto ya han fallecido 55 efectivos estadounidenses.
Temor en el mercado
Las inesperadas complicaciones que están surgiendo en la posguerra iraquí se han trasladado al mercado del petróleo en forma de una volatilidad extrema y de una fuerte alza de los precios.
El barril de brent, el indicador europeo, fluctuó ayer entre 29,7 y 29,8 dólares, lo que supone una subida del 19% respecto al precio que marcaba el barril el año pasado por estas fechas. La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) informó ayer de que el precio del barril de su cesta de siete crudos registró el miércoles su cuarto día consecutivo por encima de 28 dólares, el límite máximo de estabilidad fijado por el propio cartel.
El dominio estadounidense no ha impedido que las instalaciones petrolíferas iraquíes hayan sufrido una oleada de atentados que han retrasado la reactivación de la actividad exportadora y constituyen el factor principal de encarecimiento del barril.
El ministro provisional iraquí de Petróleo, Thamer Ghadhban, anunció ayer que el ritmo de exportaciones es ya de 700.000 barriles diarios, la mitad de lo que Irak vendía a través de la ONU el pasado mes de febrero. En términos de producción, 'el objetivo es alcanzar 1,5 millones de barriles diarios a comienzos de octubre y dos millones antes de que termine el año', explicó Ghadhban. La paulatina normalización de la actividad petrolera de Irak no termina, sin embargo, de convencer al mercado.