Las familias con ingresos de 30.000 euros nutren los fondos de pensiones
Los contribuyentes con bases imponibles inferiores a los 30.000 euros anuales son los que más ahorro destinan para constituir un fondo privado de pensiones. Según datos analizados por el servicio de estudios de Caixa Catalunya, este colectivo destina el 12% de los ingresos a dotar sus planes de pensiones, mientras que las aportaciones medias en los tramos de contribuyentes con rentas superiores son de sólo el 6,8%. El esfuerzo se reduce al 3,1% en el tramo de contribuyentes con una renta superior a los 120.000 euros. El efecto de los incentivos fiscales explica estas diferencias, según el estudio de la caja catalana.
En cuanto a la evolución en el cuatrienio 1996-2000, son de nuevo las familias con menores ingresos las que más esfuerzo han realizado. Mientras que la parte del salario dedicado por el conjunto de los partícipes de fondos y planes de pensiones creció en 3,7 puntos durante ese periodo, los contribuyentes con rentas inferiores incrementaron sus aportaciones en 4,5 puntos, mientras que los de mayores rentas sólo lo hicieron en 1,3 puntos.
El servicio de estudios de la entidad catalana destaca que el análisis de las cifras 'contradice la imagen existente de que el grueso dinerario de los planes de pensiones era, sobre todo, una inversión de carácter fiscal por parte de las rentas más altas'.
Popularización
Las cifras absolutas confirman la popularización de los planes y fondos de pensiones. De los más de 10 millones de contribuyentes que había en España en 2000, algo más del 20% (2.161.379) realizaron alguna aportación a su planes en ese ejercicio. De esos dos millones, 1.598.453 personas eran contribuyentes con una base imponible inferior a 30.000 euros y realizaron aportaciones por valor de 1.547 millones de euros, el 47,5% del total. Las aportaciones realizadas por contribuyentes con ingresos superiores a 120.000 euros fueron de 180 millones de euros (el 5,5% del total).
Sin embargo, la aportación media anual realizada por un contribuyente del segmento bajo fue de 970 euros, frente a 6.200 euros para los de rentas más altas. La aportación media española en el año 2000 ascendió a 1.500 euros.
También es significativo que sólo el 17,4% de los contribuyentes con rentas inferiores dispone de un plan de pensiones, mientras que el 61% de los que más ingresan disponen de este producto.
El trabajo de Caixa Catalunya destaca que en el cuatrienio estudiado el número de contribuyentes que realizan aportaciones a planes de pensiones se ha doblado. En 1996 sólo el 9% ahorraba mediante este tipo de productos, frente al 20% del año 2000.
La mayor presencia de este sistema de previsión obedece a diferentes causas. Según el estudio, el crecimiento se debe al proceso de externalización de los fondos de pensiones internos en las empresas, a la sensibilización de la sociedad sobre la necesidad de crear sus propios mecanismos de previsión complementarios al sistema público y a los incrementos de los límites aplicables a las deducciones por planes de pensión en la declaración del IRPF.