España y Chile eliminan las barreras fiscales a la repatriación de beneficios
Los Gobiernos de España y Chile dieron ayer un paso decisivo para eliminar las barreras fiscales que limitaban las inversiones y los proyectos de cooperación empresarial bilaterales.
En respuesta a una de las principales reivindicaciones de los empresarios, los ministros de Hacienda de España, Cristóbal Montoro, y de Chile, Nicolás Eyzaguirre, firmaban ayer en Madrid el convenio para evitar la doble imposición y prevenir la evasión fiscal que, en la práctica, supone una sensible reducción de la carga tributaria en los impuestos sobre la renta y el patrimonio que soportan las empresas españolas instaladas en Chile y las chilenas en España.
El convenio, que completa el marco legal que regula las relaciones económicas bilaterales, recoge compromisos inéditos en la legislación chilena, especialmente en materia de repatriación de beneficios, donde Chile mantiene la tasa del 15% del impuesto adicional aplicado a la repatriación de los dividendos, pero se garantiza que la totalidad del impuesto sea considerado en España como un crédito fiscal, asegurando así la plena exención tributaria en nuestro país.
Respecto a las plusvalías derivadas de la venta de acciones, el convenio fija un máximo del 16% al impuesto aplicable a las ganancias de capital, tasa muy inferior al 30% aplicado actualmente.
Chile se compromete, también por primera vez, a que la tasa de retención aplicable a los créditos bancarios no sea mayor del 5% y a reducir del 30% al 10% los pagos de regalías, es decir, la tributación por cesiones de derechos de uso de la propiedad industrial e intelectual, para incentivar la adquisición de tecnología española por parte de las empresas chilenas.
España es el primer inversor extranjero en Chile con un volumen acumulado de 8.400 millones de euros. Sólo en el año 2002 las inversiones españolas en el país andino se elevaron a unos 267 millones, lo que supone el 7,3% de todas las inversiones recibidas por el país andino.
A escala sectorial, las inversiones españolas se centran en los sectores de servicios, transportes, telecomunicaciones, banca e infraestructuras. Entre las empresas allí instaladas destacan Endesa, Telefónica, Abengoa, Aguas de Barcelona, Necso, Dragados, Bodegas Torres y los bancos SCH, BBVA, Popular y Atlántico.
El ministro Nicolás Eyzaguirre destacó, tras el acto de la firma, que el convenio potencia a Chile como 'plataforma para las inversiones españolas en América Latina'.