Telefónica admite ante la CNMV que tiene acceso a todos los créditos fiscales

El folleto de la opa de Telefónica sobre Terra no sólo ha obligado a los consejeros de la operadora a hacer pública su participación en su filial, sino que también ha forzado a Telefónica a reconocer que tiene acceso a todos los créditos fiscales de su filial, pasados y futuros. Y sin que haga falta fusión ninguna.

Telefónica nunca ha negado que fuera a hacer uso del escudo fiscal que generen las pérdidas futuras de Terra y así consta en el folleto: 'En caso de alcanzar el número de acciones mínimo a que se condiciona la oferta, se producirá la integración obligatoria de Terra en el grupo consolidado fiscal de Telefónica en el siguiente ejercicio, es decir, en 2004. En consecuencia, a partir de ese momento, la base imponible, positiva o negativa, obtenida por Terra en cada ejercicio se integrará en la base imponible consolidada del grupo. Del mismo modo, los créditos u otros beneficios fiscales devengados por Terra se adicionarán y utilizarán por el grupo consolidado fiscal'.

Pero más importantes que los créditos fiscales futuros son los pasados, que pueden ascender a 1.100 millones. Telefónica, por primera vez, reconoce que puede tener acceso a ellos sin necesidad de hacer ninguna operación adicional a la propia opa. 'Las bases imponibles negativas y los créditos fiscales generados hasta el momento por la sociedad afectada, que estén pendientes de compensar, sólo podrán ser compensados en la base consolidada imponible del Grupo Telefónica hasta el límite que permita la base imponible positiva individual que genere la propia Terra en cada ejercicio'. La posibilidad de utilizar el escudo fiscal de Terra depende, así, de la gestión que se haga en la compañía, no de la ley.

Telefónica también advierte de que una operación de fusión o integración puede cambiar el tratamiento fiscal de estos créditos, pero a renglón seguido matiza que 'no contempla' llevar a cabo operaciones de este tipo.

Sin oferta de exclusión en el horizonte

La opa que ha presentado Telefónica sobre Terra no es de exclusión, como explica en el folleto, ni tiene por qué llegar a serlo. Pero la operadora se ha cubierto las espaldas ante la CNMV con una fórmula ritual: 'Si como resultado de la presente oferta, la difusión de las acciones de Terra no permite obtener una frecuencia y liquidez bursátiles adecuadas, Telefónica se compromete a adoptar en el plazo de seis meses desde la terminación de la oferta las medidas que sean necesarias para el mantenimiento de las acciones de Terra en Bolsa o para promover la exclusión de las mismas (...), incluyendo en su caso la realización de una opa de exclusión'.Esta fórmula es idéntica a la usada en la opa de Arcelor sobre Aceralia, entre otros casos. La oferta fue hace año y medio y Aceralia sigue cotizando. La coincidencia no es fortuita. Ambas tratan de dar respuesta a un requerimiento legal, porque la CNMV puede excluir un valor de Bolsa en el caso, muy improbable para Terra, de que incumpla las condiciones de liquidez.Otras compañías que sí han excluido de Bolsa a empresas que antes oparon recurren a opciones más claras para avisarlo. 'En caso de que la presente oferta tenga resultado positivo, la sociedad oferente asume el compromiso de convocar junta (...) y aprobar la exclusión de cotización', escribió Allied Domecq sobre Bodegas y Bebidas.