España insiste en que tendrá apoyos para bloquear la nueva PAC
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Miguel Arias Cañete, aseguró ayer que el Gobierno no renunciará 'ni un ápice' a la defensa de los intereses del campo español en las negociaciones de la reforma de la política agraria común (PAC), y apuntó la posibilidad de que España logre los apoyos suficientes para ejercer una minoría de bloqueo en caso necesario. 'España no está sola', aseveró.
'España acudirá a las negociaciones, que van a ser complicadas, con un espíritu de diálogo pero sin renunciar un ápice a la defensa del mantenimiento de la actividad agraria y ganadera en todo el territorio español', dijo el ministro, partidario de alcanzar el consenso antes de recurrir al bloqueo.
Arias Cañete, que se reunió con los representantes de las comunidades, recordó que España avanza en establecer alianzas con otros países para adecuar la reforma a las necesidades españolas, pero reconoció que el consenso que se alcance deberá ajustarse a los Quince, y no sólo a España. 'Habrá que hacer concesiones', admitió. Entre las posturas próximas a España, destacó la de Francia, frente a Reino Unido, Suecia, Dinamarca y Holanda, países más cercanos a las tesis de Bruselas. En este sentido, confió en que Francia logre acercar posiciones con Alemania el próximo miércoles en la cumbre franco alemana.
'No sé si tendrá o no influencia sobre el futuro Consejo Europeo, pero el diálogo entre países es bueno en la medida en que logremos acercar posiciones y configurar un modelo aceptable para todos', estimó.
El ministro confió además en que la propuesta de compromiso que la Comisión Europea presentará el próximo miércoles a los Estados miembros recoja las principales reivindicaciones españolas, así como el dictamen del Parlamento Europeo que suaviza la postura inicial de Bruselas.
España es contraria al desacoplamiento total y a la regresividad de las ayudas y defiende un cambio en el sistema de penalizaciones al arroz, al tiempo que espera mejoras 'sustanciales' en las propuestas de Bruselas respecto a herbáceos, frutos secos, trigo duro, forrajes y cereales.
Recordó, además, que la Eurocámara suavizó la postura inicial de la Comisión Europea y se acerca a las reivindicaciones de España, al defender un tratamiento especial para las zonas desfavorecidas y la disociación parcial de las ayudas a la producción a determinados sectores. No obstante, Arias Cañete indicó que existen diferencias de interpretación entre Bruselas y los Estados miembros respecto a la definición de desacoplamiento parcial.