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Mercados internacionale

El Dow Jones supera el nivel de los 9.000 puntos

Cuentan los analistas en sus informes que los 9.000 puntos del Dow Jones no tienen una especial significación técnica, porque no hay muchas órdenes de compra o de venta en juego. Reconocen, eso sí, que supone un apunte psicológico importante. Ayer superó esa cota tras subir el 1,3%. El Nasdaq ganó el 1,94%.

Desde la apertura al cierre de la Bolsa de Nueva York los operadores estuvieron pendientes de esta circunstancia. El Dow se situó tímidamente por encima del 9.000 a media sesión y ahí aguantó sin convencimiento. A pocos minutos del cierre, reaparecieron otros factores técnicos y el índice repuntó con fuerza, hasta llegar a los 9.038,98.

Ya el comienzo fue prometedor, alentado por las cifras de actividad en el sector servicios que resultaron mejores a las esperadas. El índice ISM se situó en los 54,5 puntos en mayo, por encima de los 50,7 de abril, y superó las expectativas de los economistas, que esperan un alza hasta los 52 puntos. Estas cifras se suman a las del lunes relativas a la actividad en el sector manufacturero, también mayor a la esperada. Las Bolsas alimentan una expectativa algo mejor para los próximos meses.

Disney fue uno de los valores destacados de la sesión, con un alza del 5,3%, después de que su máximo responsable afirmara que el nivel de reservas para sus parques temáticos en verano es 'alentador'. Martha Stewart Omnimedia, por su parte, recuperaba parte del desplome de la víspera. La estrella de la televisión, presidenta de la compañía, fue acusada formalmente de información privilegiada en la venta de acciones de Imclone en 2001.

Palm subía un 19% tras anunciar la compra de Handspring. Electronic Data Systems se anotó un 14% tras obtener un contrato de siete años con Barclays.

Los mercados europeos registraron ayer ganancias, aupados por la expectativa de un recorte de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo en la reunión de hoy, así como por el buen dato del sector servicios en Estados Unidos.

Una encuesta de Reuters indica que más del 90% de los economistas espera que la autoridad monetaria decida una rebaja del precio del dinero en la zona. La fortaleza del euro, la desaceleración económica y las menores presiones inflacionistas, que ya apuntó el propio Wim Duisenberg, son argumentos a favor de la relajación de la política monetaria. La duda estriba en saber si la rebaja será de un cuartillo o medio punto.

En este ambiente, los mercados se anotaron alzas entre el 1,76% de Fráncfort y el 0,8% de París. Petroleras, químicas y tecnológicas fueron los sectores más favorecidos. Entre las primeras, Royal Dutch Petroleum sumó un 2,1% y Total, el 2,19%.

Una de las subidas más significativas de la jornada correspondió a Cable & Wireless, un 6,98%. La compañía anunció una serie de medidas, que incluye su salida del mercado estadounidense, la suspensión del pago de dividendos durante un año y el despido de 1.500 trabajadores, después de registrar pérdidas récord de unos 10.000 millones de euros en su ejercicio fiscal.

En el polo opuesto se situó DaimlerChrysler, que retrocedió el 1,87% después de rebajar las previsiones de resultados para el ejercicio por el incremento de la competencia, especialmente en su división Chrysler de EE UU.

São Paulo registró ayer el sexto avance de las últimas siete sesiones. Un 2,77% se anotó el índice Bovespa, entre cierto optimismo por las reformas emprendidas por el presidente Lula Da Silva, cuya popularidad aumenta. México avanzó el 2,24% y Buenos Aires retrocedió el 0,86%.

El Nikkei puso freno ayer a las ganancias. Retrocedió un leve 0,08% tras cinco avances consecutivos. El nerviosismo se apoderó a última hora de los inversores, que optaron por las ventas y evitaron que el índice viviese la mejor racha en dos años. Tokyo Electron sufrió la recogida de beneficios y bajó el 0,56%.

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