El Nasdaq alcanza el nivel más alto desde junio de 2002
Wall Street no tuvo suficiente impulso para hacerse con el sexto avance consecutivo ayer. Los datos económicos del día dieron una nota de optimismo pero los inversores finalmente se decantaron por la cautela.
La economía de EE UU creció un 1,9% en el primer trimestre del año, tres décimas más que el cálculo inicial. El dato estuvo en línea con las previsiones de los expertos. Sirvió para mejorar las expectativas económicas y dar vida a los mercados en un principio. La caída de las peticiones semanales de subsidio de desempleo, aunque menor de lo previsto, también contribuyó a la buena tendencia inicial.
Los operadores del mercado señalan que muchos inversores están ansiosos por entrar en el mercado. En las últimas sesiones las buenas noticias han marcado los movimientos de los inversores a la vez que los datos negativos, como la caída de los bienes duraderos en abril, han pasado más desapercibidos.
El Nasdaq fue el único que logró mantener la ganancia inicial, aunque ésta quedó reducida a un 0,75% desde el 1,79% que alcanzó en el mejor momento del día. El avance lo situó en el nivel más alto desde junio de 2002. Dow Jones (-0,93%) y S&P 500 (-0,38%) retrocedieron.
El buen comportamiento de los semiconductores facilitó el avance del índice tecnológico. Las buenas previsiones de la francesa ST Microelectronics esta semana favorecieron a otras grandes del sector como Intel (+5,52%).
En el polo opuesto estuvo Kodak. La compañía perdió un 5,2% y sufrió la mayor caída del Dow Jones afectada por un informe negativo.
La mejora de las expectativas económicas permitió que las ganancias se impusieron por tercer día consecutivo en las principales plazas europeas. El buen arranque de Wall Street sirvió de reclamo y las ganancias oscilaron entre el 0,16% del Ibex y el 0,66% del Cac. El Dax, afectado por su horario extendido, terminó cediendo un 0,44% en una sesión en la que las Bolsas de Austria, Finlandia, Suecia y Luxemburgo cerraron por festivo.
Los valores tecnológicos (+1,2%), las aseguradoras (+1,12%) y la banca (+0,63%) fueron los más beneficiados. La automoción se vio muy favorecida en un principio pero la subida quedó en un 0,6% después de que el euro se recuperara de una caída inicial. La moneda única sigue por encima de 1,18 dólares. El perfil exportador del sector le ha convertido en uno de los más azotados recientemente.
El optimismo de ciertas empresas también atrajo compradores. Rolls-Royce reiteró que espera un crecimiento de beneficios para el año y subió un 11,06%. Thysenkrupp anunció que espera que los ingresos se multipliquen por cuatro en el próximo año aunque no pudo aguantar la subida y acabó cayendo un 1,01%.
En el sector financiero, Lloyds (+4%) destacó entre especulaciones de que podría desprenderse de una división. Fortis, en el polo opuesto, cotizaban sin derecho al último dividendo y cayó un 5,49%.
Las malas noticias tampoco faltaron. Securicor cayó un 17% después de advertir que ganará menos en la segunda mitad del año por las dificultades de mercado. Dos recomendaciones a la baja de Credit Suisse First Boston afectaron a la química ICI (-2,85%) y a TUI (-2,06%).
El real brasileño avanzó frente al dólar tras conocerse que Brasil obtuvo en abril un superávit fiscal de unos 2.794 millones de euros, el mayor saldo mensual de los últimos 12 años. La moneda se intercambiaba por 2,93 dólares. En Venezuela los inversores siguieron buscando refugio en la Bolsa (+6,66%) por temor a una devaluación.
Los mercados asiáticos siguieron al alza al compás del buen comportamiento de Wall Street la víspera. El Nikkei se anotó un alza del 1,71% que le situó en el nivel más alto desde el 24 de marzo. La caída del yen frente al dólar animó a los exportadores y facilitó las alzas.