España es el tercer país de la OTAN con menos gasto militar con relación al PIB
El accidente ha abierto la discusión sobre si España, toda vez que ha incrementado su participación en misiones internacionales, debe reforzar su presupuesto. Lo cierto es que es el país europeo de la OTAN, con excepción de Luxemburgo, con menor gasto militar en porcentaje del PIB.
Los datos de la OTAN reflejan que el gasto español equivale al 1,2% del PIB, frente al 2% de media de los socios europeos de la Alianza y el 2,7% del conjunto de la organización. Luxemburgo es el país con menos gasto proporcional, un 0,8% del PIB, seguido de Canadá, que gasta un 1,1% de su PIB. Turquía es, proporcionalmente, el país que hace un mayor esfuerzo presupuestario, el 5% del PIB.
De 1991 a 1994, el gasto español era del 1,6% del PIB; en el lustro siguiente, la ratio cayó al 1,4% y la tendencia a la baja ha seguido año tras año. La partida del Ministerio de Defensa representa el 5,7% del Presupuesto del Estado en 2003. El presidente Aznar adelantó ayer en Onda Cero la posibilidad de reabrir el debate del gasto presupuestario. 'No son gastos populares', declaró Aznar, 'pero si podemos hacer algo para mejorar la seguridad de las Fuerzas Armadas, lo haremos'.
El portavoz de Defensa del PSOE, Jordi Marsal, manifestó ayer a Cinco Días que su partido 'no está cerrado a dialogar' sobre la posibilidad de aumentar el presupuesto de Defensa. Marsal apostó también por 'una mejor gestión de los recursos disponibles y por 'aumentar los programas conjuntos con otros países'. El diputado socialista puso como ejemplo la construcción del A-400-M, un avión de transporte en cuya financiación participan los países de la UE.
Aznar rechazó que el Ejecutivo tome decisiones que, por ahorrar costes, pongan en peligro la seguridad de las tropas. El Gobierno 'procura dar siempre a los militares lo mejor que podemos', declaró el presidente.
Tras el accidente de Trebisonda se dispararon las críticas por el hecho de que el Gobierno alquilara un vetusto Yak-42 para transportar a los militares que venían de una misión de paz en Afganistán. Sobre este punto, Aznar fue prudente, a la espera del análisis de las cajas negras del avión. Pero destacó su convicción de que 'es muy probable que todo se tratase de un error humano' y que el siniestro no estuviera relacionado con el mal estado del aparato.
En Europa, la propuesta de crear una fuerza militar conjunta también ha reabierto el debate sobre las restricciones que se aplican desde hace años al gasto militar.