CiU supedita su futura colaboración con Madrid a los horarios comerciales
Convergència i Unió (CiU) entró ayer en el debate sobre los horarios comerciales introducido en la campaña electoral por los dos principales partidos de ámbito nacional. Lo hizo a través del director general de Comercio de la Generalitat, Jaume Angerri, quien condicionó el futuro apoyo de la coalición al partido que gane las próximas elecciones generales al respeto al modelo comercial catalán y a una regulación de horarios comerciales que no lo ponga en peligro.
Angerri aseguró a Europa Press que 'ésta será una de las condiciones para quien quiera gobernar el Estado con el apoyo de CiU'. Además, subrayó la importancia de llegar a un acuerdo sobre los horarios comerciales antes de 2005, cuando está prevista su liberalización total.
CiU ha presentado en el Parlamento catalán una proposición no de ley, que será planteada en el Congreso de los Diputados, para volver a la situación existente en España en 1996, es decir, un máximo de 72 horas semanales de apertura comercial y hasta un máximo de ocho festivos al año.
Angerri explicó que se trata de un acción preventiva, para evitar una situación de 'indefensión' que podría producirse en el sector, ya que el Tribunal Constitucional no tiene previsto fallar durante 2004 sobre el recurso presentado por la Generalitat a la liberalización de horarios. La respuesta del PP ante esta iniciativa del Gobierno catalán, señaló, ha sido de 'mucha prudencia'.
En opinión de Angerri, la regulación actual plantea varios problemas. Los establecimientos de menos de 300 metros cuadrados pueden abrir 'a cualquier hora durante las 24 horas del día', lo que ha originado las quejas de los ayuntamientos y de los vecinos de las tiendas que se acogen a esta opción.
PP y PSOE mantienen a escala nacional actitudes enfrentadas al respecto.