Hugh Thomas pone como ejemplo ético al fundador de Barreiros
El hispanista inglés Hugh Thomas citó ayer al empresario orensano Eduardo Barreiros, que levantó de la nada una fábrica de motores diésel, como ejemplo de compromiso ético. Thomas, que prepara una biografía del empresario, asignó a Barreiros un papel capital en la modernización industrial y social de los años cincuenta y sesenta durante una conferencia organizada por la cátedra de æpermil;tica de la Universidad Europea de Madrid CEES y la Fundación Eduardo Barreiros, para tratar de analizar los códigos profesionales de conducta que rigen en la industria del automóvil.
Tal y como se señaló en las jornadas, la ética ha pasado a ocupar de nuevo un lugar destacado en las principales empresas. Tanto los accionistas como los clientes piensan en este referente como la mejor manera de prevenir los escándalos contables. En ese sentido, un ejemplo de gestión empresarial ética ha sido durante más de 100 años la industria del automóvil, cuyos códigos de conducta deberían ser modelo a imitar en otros sectores. æpermil;sa fue la tesis principal de las jornadas, cuyo tema principal fue la ética empresarial en el mundo del automóvil.
Comisión de ética
Otro de los ponentes fue Juan Antonio Moral, ex presidente de Renault, quien afirmó que 'los fabricantes de automóviles cuentan desde antiguo con una cultura empresarial muy definida, centrada tanto en la tecnología como en las relaciones laborales y la transparencia frente a inversores y clientes'. A su juicio, suponen un ejemplo de reflexión sociológica, con estructuras de organización y códigos deontológicos que a lo largo de los años han servido como ejemplo integrador. Moral demandó la elaboración de una comisión de ética en las principales empresas, que debería estar integrada en el consejo de administración. Juan Cruz, escritor y periodista, afirmó en su intervención que 'la industria del automóvil se parece al control de calidad estricto y riguroso que se reservaría para los alimentos o fármacos'.