Francia y Alemania se movilizan contra los recortes en el gasto público
Con más de 200 manifestaciones convocadas en Francia con el lema de la defensa de las pensiones, este primero de mayo abre un mes "caliente", y es un test para el Gobierno conservador de Jean-Pierre Raffarin que cumple casi un año en el poder.Los tradicionales desfiles de la fiesta del trabajo también se perfilan como un test para la capacidad de movilización de los sindicatos de cara a la jornada unitaria de acción y huelgas del 13 de mayo contra el plan de reforma del sistema de las pensiones.
Si bien la política y socialmente explosiva reforma de las pensiones -que dará lugar a otra jornada de movilización el 25 de mayo- centra el descontento, el aumento del paro y los despidos auguran un mes "caliente". Se trata de la primera ocasión para los sindicatos de medir su capacidad de movilización callejera contra la reforma de las pensiones desde que el Gobierno presentó sus ejes principales y antes de su primer examen en Consejo de ministros el próximo día 7. El plan prevé alargar el período de cotización de los funcionarios, de 37,5 a 40 años, como en el sector privado, para el 2008, y a partir de entonces para todos hasta los 42 años en el 2020, para tener derecho a una pensión.
Alemania: Contra los recortes de Schröder
El acto central de los sindicatos alemanes con motivo del 1 de mayo en Neu Anspach (centro del país) empezó con un servicio religioso ecuménico. El orador principal del acto será el canciller Gerhard Schröder quien defenderá sus planes de reforma del estado de bienestar que han sido duramente criticados por los sindicatos. Tras Schroeder, hablará el presidente de la Confederación de Sindicatos Alemanes (DGB), Michael Sommer, quien ha anunciado que abordará abiertamente los temas sobre los que difieren el Gobierno y los representantes de los trabajadores.
El plan de Schroeder comprende la reducción de los subsidios del paro de los actuales 32 a 12 meses -ampliable a 18 meses para los mayores de 55 años-, así como la equiparación de los parados crónicos y los perceptores del auxilio social. Se prevén además recortes en la sanidad pública y las jubilaciones. Sommer, considera que los planes de reforma le exigen sacrificios a las personas que tienen ingresos medios y bajos mientras que favorecen a los privilegiados de la sociedad.