Suave mejora en la actividad industrial europea
En Alemania, los pedidos de construcción cayeron un 12,2% en febrero con respecto a febrero del año anterior. Esta caída, al igual que la sufrida en enero, supera el ya elevado deterioro del año pasado, disipándose los síntomas de mejoría del sector constructor de finales del año pasado. El consumo de manufacturas de Francia superó en marzo nuestra previsión por cuarto mes consecutivo. Esta intensificación en el ritmo de demanda de consumo familiar procede de la demanda de bienes de equipamiento del hogar y textiles. En cambio, la demanda de automóviles se ha resentido debido al empeoramiento de la coyuntura.
En Brasil, la demanda doméstica en febrero superó nuestra previsión. Las ventas reales al por menor crecieron un 18,5% anual, casi el doble del incremento registrado en enero. Sin embargo, el ciclo-tendencia del indicador sigue desacelerándose. Esta leve pérdida de ritmo de la demanda interna está influida tanto por factores internos (altos tipos de interés y elevada inflación) como por el escenario internacional.
En Argentina, el estimador mensual de actividad (indicador adelantado del PIB) creció un 5,8% anual en febrero. El crecimiento acumulado en los dos primeros meses de 2003 es del 5% y esperamos una expansión mayor en marzo. Aunque son cifras muy positivas, es necesario recordar que el nivel de referencia es muy bajo.
La actividad industrial en Alemania y Francia refleja una suave mejora desde el inicio del año. Sin embargo, la incertidumbre que ha rodeado el panorama internacional debido al conflicto bélico ha deteriorado la confianza industrial. Confiamos en que la rapidez con que se ha resuelto la guerra se traducirá en una mejora de las expectativas empresariales a partir de mayo y seguidamente en un afianzamiento de los tímidos indicios de reactivación que ya se observan. Pese a todo, la recuperación no ganará fuerza hasta el segundo semestre del año.
En Alemania, el índice de producción industrial (IPI) creció por encima de lo esperado en los dos primeros meses del año y acumula hasta febrero un aumento del 2,1%, frente a la caída del 1,5% en 2002. La mejora ha procedido fundamentalmente de la recuperación en la producción de bienes de equipo e intermedios. En cambio, los bienes de consumo (especialmente los duraderos) no muestran síntomas de recuperación a causa de la debilidad del consumo privado alemán y, en general, del europeo.
En Francia, el IPI de febrero también se comportó mejor de lo previsto por segundo mes consecutivo. El crecimiento subyacente del índice general ha mejorado en los últimos meses gracias a la favorable evolución de los bienes alimenticios, automóviles y energía. Sin embargo, la producción de bienes de consumo no duradero y de capital aún se contrae, aunque a mucho menor ritmo que hace un año. La producción de bienes intermedios se ha deteriorado en los últimos meses, reflejando la reducción en el ritmo de demanda interindustrial debido al pesimismo empresarial. El crecimiento medio del último trimestre ha sido del 1% para el índice general, el más elevado desde septiembre de 2001.
Persiste el deterioro del mercado laboral estadounidense
En Estados Unidos, los pedidos de bienes duraderos fueron mejores de lo previsto en marzo. Crecieron un 1,2% interanual, cerrándose el primer trimestre con un aumento del 0,8%, algo menor que el registrado a finales de 2002. No obstante, continúa la debilidad del mercado de trabajo: las peticiones de desempleo han vuelto a aumentar en la segunda semana de abril hasta 455.000 (la más alta desde abril de 2002), y el incremento medio en las últimas cuatro semanas ha sido de 439.000 (frente a un aumento medio de 420.000 en marzo).En el Reino Unido, la tasa de paro se mantuvo en marzo en el 3,1% registrado en el año 2002. La crisis industrial, al contrario de lo que ha ocurrido en economías como la alemana, no ha dañado en exceso su mercado laboral. Esto explicaría en parte el dinamismo que sigue presentando su consumo privado.
Ligera recuperación de los servicios
Los últimos datos de los indicadores de actividad del sector servicios invitan a un ligero optimismo. Pese a la pausa ocasionada por el conflicto bélico de Irak en la senda de recuperación iniciada en el último trimestre del año pasado, actualmente los principales indicadores de actividad nacional en los servicios muestran claros síntomas de reactivación. El transporte aéreo de viajeros cayó en el mes de marzo un 0,6% en tasa interanual, sin embargo, teniendo en cuenta el efecto Semana Santa el dato ha sido muy positivo. Su tendencia dibuja una persistente recuperación a lo largo del año pasado que esperamos se mantenga durante 2003. Para el conjunto del ejercicio, creemos que crecerá en torno al 4,2%, frente a la caída del 1,1% de 2002. Por otro lado, la entrada de turistas ha acumulado durante el primer trimestre del año un crecimiento del 0,2%. Este dato es también positivo valorando el efecto Semana Santa (aunque ahora la influencia es menor). La tendencia presenta una suave aceleración iniciada en el año 2001 que rompe con la pérdida de ritmo iniciada en 1997.